Page 576 - HASTA MAYO
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Eres el amor de mi vida
Es preciso el momento para volcar mis sentimientos en este humilde papel,
donde la mágico se haga eterno… celebrando este bello día que me llena
de felicidad, pues ver tu carita risueña me produce alegría y bondad; y
verte tan lozana en esta vida, te hace dueña de la juventud y de mi amistad.
Eres la primavera que le da dulzura a estos versos, eres la mujer cuyas
manos tienen la delicadeza para aliviar mis tristezas, y las mías poseen el
amor que necesitas para endulzar tus proezas, haciendo del paisaje el
lienzo más hermoso reflejando tu belleza.
He recorrido mil distancias, pero ningún camino es tan bello como ir de tu
mano, he tropezado mil veces, pero ahí has estado siempre tú, cuando
gritaba de dolor; fuiste un apoyo constante…por esto doy testimonio de fe
y amor como humilde escribano, de este sentimiento lindo que me
embarga, expresándote mi cariño con mis propias manos.
Comienzo a rimar la historia del por qué eres el amor de mi vida, la maga
que hechizo de encanto mi mundo, haciendo de éste un paraíso,
convirtiéndome en tu títere cada vez que sientes que por tus manos me
deslizo, sintiéndote ahora sí segura que nunca pronunciaré una despedida.
Hablar de ti es incansable, pues tú eres mi inspiración, tú le das alegría al
ser que yo vivo, tú eres un encanto y divinidad mujer, tú me provocas, me
emocionas, haces nacer en mí la pasión; cada vez bajo mis sabanas
cuando tu olor percibo, sumergiéndonos en la fuente de vida y placer.
He de terminar estos humildes versos, sellando en ellos mi más grande
ilusión, ven camina siempre junto a mí, te lo pido de favor, bajo esta
estrella hermosa que nos invita a llegar juntos hasta nuestro redentor,
implorando siempre por este lindo sentimiento tras una sencilla oración.
Amor, acompáñame, que Dios está dispuesto hacer maravilloso nuestro
destino, acompáñame a envejecer, a cuidar a nuestros hijos…; sé siempre
tú a la que ame fielmente mi corazón, y se tú la que, en un sarcófago, algún
día me estés enterrando.
Recuerda que, si he de faltarte, mi alma ha de quedar para cuidarte, no te
preocupes mi amor, que nada ni nadie te lastimará, no me llores, vela por
mi hija, por el mundo que construimos; pues desde donde éste mi vida
seguirá siendo tuyo, porque te amo y siempre te amaré.
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