Page 993 - HASTA MAYO
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Quedo en silencio, pensando en ti, recordando tu sonrisa, tus palabras y
                  sintiendo que somos eco el uno del otro, porque es como estar viviendo tus
                  pensamientos, que son como los míos, iguales en ausencia y en el amor que
                  nos llena la vida.


                   – Somos eco de este amor –


                  Me duele la ausencia, y muchas veces, demasiadas veces, me duele no poder
                  tocarte, poder sentir que eres mía, que soy tuyo…


                  Cada paso que doy es para ti y por ti. Sé que también soy tu otra parte, entre
                  nosotros no hay dudas, sólo esperanza de que cada mes que pasa nos acerca
                  más el uno con el otro.


                  ¿Sabes por qué? ¡Porque no hay amor igual que el nuestro! Por eso quizás
                  muchas veces nuestras cartas parecen viejas y añejas, pero no es así, estas
                  son las letras de un abril que parece más tierno, más romántico.


                   Quiero verte feliz, que leas esta carta y te sientas amada.


                  Y aunque duela hasta los huesos la espera, recuerda amor que al final todo
                  habrá valido la pena, soy yo el que te ama con un amor primaveral y otoñal,
                  todas  las  estaciones  pasan  por  nosotros,  más  tú  y  yo  permanecemos
                  perennes como la hierba, somos eternos, somos amor en su pura esencia, no
                  hay nada parecido para mí.


                   Es un maravilloso amor –


                  Es noche, muy tarde, y un frescor de madrugada hizo brotar estas letras
                  para ti. Sé que siempre esperas mis letras, no podía retenerlas más tiempo
                  pues son regalo y muestra del profundo amor que tengo para ti.


                  De repente, quise escribirte esta carta, para que te siga, te susurre, te haga
                  compañía, y te diga algo de mí cuando lejano caminas por las calles de tu
                  ciudad.


                  De repente quise enviarte esta carta que es expresión de una gran certeza,
                  ¿sabes? certeza de nuestro amor, de que te amo, me amas y nos necesitamos
                  el uno al otro.



                  Te amo vida mía, gracias, muchas gracias por permitirme el amarte día a
                  día, noche a noche. Te adoro vida mía…






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