Page 20 - TAGR-4 Spanish
P. 20
117 Extrajeron de la cantera un primer carro del mineral y lo enviaron a un
118 fundidor. ¡El resultado probó que tenían una de las minas más ricas de
119 Colorado! Con algunos carros más de ese mineral saldarían todas sus deudas.
120 Entonces empezarían a llegar las grandes ganancias.
121 ¡Hacia abajo fueron las perforadoras! ¡Hacia arriba fueron las esperanzas de
122 Darby y de su tío! Pero entonces algo ocurrió ¡La veta de oro desapareció!
123 ¡Habían llegado al final del arco iris y la olla de oro no estaba allí! Siguieron
124 perforando, intentando encontrar desesperadamente la veta otra vez, pero no
125 lograron ningún resultado.
126 Finalmente, decidieron RENDIRSE. Vendieron la maquinaria a un chatarrero
127 por unos pocos cientos de dólares y tomaron el tren de regreso a casa.
128 ¡Algunos chatarreros son ingenuos, pero éste no lo era! Llamó a un ingeniero
129 de minas para que examinara la mina e hiciera unos cálculos. El ingeniero le
130 explicó que el proyecto había fracasado porque los dueños no estaban
131 familiarizados con las “vetas falsas”. ¡Sus cálculos indicaban que la veta se
132 hallaba SÓLO A UN METRO DE DONDE LOS DARBY HABÍAN
133 DEJADO DE PERFORAR! ¡Y allí es exactamente dónde lo hallaron!
134 El “Chatarrero” extrajo millones de dólares en oro de la mina porque fue lo
135 suficientemente inteligente como para pedir el consejo de un experto antes de
136 darse por vencido. La mayor parte del dinero que se invirtió en la maquinaria
137 se debía a los esfuerzos de R.U. Darby, quien era entonces un hombre muy
138 joven. El dinero procedía de sus familiares y vecinos quienes habían confiado
139 en él. Aunque tardó varios años, les devolvió hasta el último centavo.
16