Page 300 - TAGR-4 Spanish

123 “Señor Ford, de entre los hombres que me han proporcionado gran parte del
124 material esencial para mi trabajo, usted ha estado entre los más útiles. Deseo
125 adquirir su actitud perseverante, su determinación, su equilibrio y su confianza
126 en sí mismo, que le permitieron vencer la pobreza y organizar, unificar y
127 simplificar el esfuerzo humano, para así poder ayudar a los demás a seguir sus
128 pasos”.
129 “Señor Edison, le he tenido sentado cerca de mí, a mi derecha, en la
130 cooperación que me brindó durante mi investigación sobre las causas del éxito
131 y el fracaso. Deseo adquirir de usted el maravilloso espíritu de FE con el que
132 ha descubierto tantos secretos de la naturaleza, el espíritu de trabajo
133 persistente con el que tantas veces ha vencido las derrotas”.
134 Mi método de dirigirme a los miembros de mi gabinete imaginario variaba
135 según los rasgos de carácter que más me interesaba adquirir en el momento.
136 Estudié el historial de sus vidas con esmero y cuidado.
137 Después de varios meses de seguir este procedimiento, me sorprendí al
138 descubrir que estas figuras imaginarias se volvieron reales de forma aparente.
139 Cada uno de estos nueve hombres desarrolló características individuales que
140 me asombraron. Por ejemplo, Lincoln desarrolló el hábito de llegar siempre
141 tarde para luego entrar de forma solemne. Cuando llegaba, caminaba muy
142 lentamente con las manos cogidas por detrás y de vez en cuando, se detenía al
143 pasar y, momentáneamente, dejaba descansar su mano sobre mi hombro.
144 Siempre tenía una expresión de seriedad en el rostro y rara vez lo vi sonreír.
145 Las preocupaciones de una nación destrozada le hacían parecer solemne.
146 Éste no era el caso de los demás. Burbank y Paine con frecuencia se permitían
147 participar en conversaciones ingeniosas que a veces parecían sorprender a los
148 demás miembros del gabinete. Una noche, Paine me pidió que preparara una
149 conferencia sobre “La Edad de la Razón” para pronunciarla en el púlpito de
296