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24 PIENSE Y HÁGASE RICO
71 Barnes supo que él podría vender la Máquina de Dictar de Edison. Se lo propuso
72 a Edison y en seguida obtuvo su oportunidad. Logró vender la máquina. De hecho,
73 lo hizo con tanto éxito que Edison le adjudicó un contrato para distribuirla y
74 comercializarla por todo el país. Gracias a esta asociación mercantil apareció el
75 famoso eslogan, "Hecho por Edison e instalado por Barnes".
76 Su alianza comercial fue un gran éxito durante más de treinta años. Gracias a ella
77 Barnes se hizo rico, pero también logró algo infinitamente más grande, demostró
78 que uno realmente puede "Pensar y Hacerse Rico".
79 No tengo forma de saber cuánto dinero en efectivo proporcionó a Barnes su
80 DESEO. Tal vez fueron dos o tres millones de dólares, pero dicha cantidad, sea
81 cual fuere, se vuelve insignificante cuando se la compara con la gran virtud que
82 adquirió en forma del conocimiento definitivo, que un impulso intangible del
83 pensamiento puede convertirse en su homólogo material con la aplicación de
84 principios conocidos.
85 ¡Barnes literalmente creyó en una asociación con el gran Edison! Se vio como
86 dueño de una fortuna. No tenía nada con que empezar, excepto la capacidad para
87 SABER LO QUE QUERÍA Y LA DETERMINACIÓN DE PERMANECER
88 FIEL A ESE DESEO HASTA HABERLO REALIZADO. No tenía dinero con
89 el que comenzar. Su educación era muy escasa y carecía de influencias. Pero sí tenía
90 iniciativa, fe y el deseo de triunfar. Con estos poderes intangibles se convirtió en el
91 socio número uno del inventor más grande que jamás ha existido.
92 Ahora, consideremos una situación diferente y analicemos a un hombre que tuvo
93 bastantes pruebas tangibles de riquezas, pero que perdió porque se detuvo a un
94 metro de donde se hallaba la meta que se había propuesto.