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1203                                             ISAÍAS 64:6–65:7
       tus caminos; he aquí, tú te eno-         CAPÍTULO 65
       jaste porque pecamos y hemos
       continuado en los pecados larga-  El antiguo Israel fue desechado por
       mente, ¿y seremos salvos?        haber rechazado a Jehová — El pue-
         6  Y todos nosotros somos      blo de Jehová se regocijará y triun-
             a
       como  suciedad, y todas nues-    fará durante el Milenio.
       tras obras justas como trapo de
                                            a
       inmundicia; y todos nos mar-     FUI  buscado por los que no pre-
       chitamos como la hoja, y nues-   guntaban por mí; fui hallado por
       tras iniquidades nos llevan como     los que no me buscaban. Dije
       el viento.                       a una nación que no invocaba
         7 Y nadie hay que invoque tu   mi nombre: ¡Heme aquí, heme
       nombre, que se despierte para    aquí!
       apoyarse en ti; porque has escon-  2 Extendí mis manos todo el
                                                         a
       dido de nosotros tu  rostro y nos   día a un pueblo  rebelde, que
                          a
       has dejado marchitar a causa de   anda por un camino que no es
       nuestras iniquidades.            bueno, en pos de sus propios
         8 Ahora pues, Jehová, tú eres   pensamientos;
               a
       nuestro  padre; nosotros somos    3 pueblo que en mi rostro me
       el barro, y tú nuestro alfarero; así   provoca de continuo a ira, sacri-
            b
       que  obra de tus manos somos     ficando en huertos y quemando
                                                      a
       todos nosotros.                  incienso sobre  ladrillos;
         9 No te enojes sobremanera, oh   4 que se quedan entre los se-
       Jehová, ni te acuerdes siempre de   pulcros y en vigilia pasan la no-
       nuestra iniquidad; he aquí, mira,   che; que comen carne de cerdo y
       te rogamos, pueblo tuyo somos    en sus ollas hay caldo de cosas
       todos nosotros.                  inmundas;
         10 Tus santas ciudades están    5 que dicen: Quédate en tu lu-
       desiertas; Sión es un desierto;   gar; no te acerques a mí, porque
                                            a
       Jerusalén, una desolación.       soy  más santo que tú; éstos son
         11 Nuestra santa y gloriosa    humo en mi nariz, fuego que arde
       a  casa, en la cual te alabaron   todo el día.
       nuestros padres, fue consu-       6 He aquí que escrito está de-
       mida por el fuego; y todas nues-  lante de mí: no callaré, sino que
       tras cosas preciosas han sido    a  recompensaré y daré el pago en
       destruidas.                      su seno
         12 ¿Te contendrás, oh Jehová,   7 por vuestras iniquidades, dice
       ante estas cosas? ¿Callarás y nos   Jehová, y por las iniquidades de
       afligirás sobremanera?            vuestros padres juntamente,
          6 a GEE Limpio e        del Señor.            Éx. 20:24–25.
             inmundo.        65 1 a Rom. 10:20.      5 a Mateo 9:10–12;
          7 a DyC 84:19–25.     2 a GEE Rebelión.       Lucas 18:9–14;
          8 a Alma 11:38–40.    3 a Es decir, Israel no de-  Alma 31:13–19.
           b Isa. 29:16.          bía ofrecer sacrificios   6 a Jer. 16:18;
             GEE Creación, crear.  sobre altares de roca   DyC 1:8–10.
          11 a GEE Templo, Casa    labrada.
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