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JEREMÍAS 9:20–10:9                                         1224
       porque han derribado nuestras            CAPÍTULO 10
       moradas.
         20 Oíd, pues, oh mujeres, la pa-  No aprendáis el camino de las demás
       labra de Jehová, y vuestro oído   naciones — Sus dioses son ídolos e
       reciba la palabra de su boca; y en-  imágenes de fundición — Jehová es
       señad endechas a vuestras hijas y   el Dios verdadero y viviente.
       cada una a su amiga lamentos.
         21 Porque la muerte ha subido   OÍD la palabra que Jehová ha
       por nuestras ventanas y ha en-   hablado a vosotros, oh casa de
       trado en nuestros palacios, para   Israel.
       talar a los niños de las calles, a   2 Así dice Jehová: No aprendáis
       los jóvenes de las plazas.       el camino de las naciones ni de las
         22 Di: Así dice Jehová: Los cuer-  señales del cielo tengáis temor,
       pos de los hombres muertos cae-  aunque las naciones las teman.
       rán como estiércol sobre la faz   3 Porque las  costumbres de
                                                       a
       del campo y como manojos tras    los pueblos son vanidad, por-
       el segador, y no hay quien los   que cortan un árbol del bosque
       recoja.                          y lo labran las manos del artífice
         23 Así dice Jehová: No se alabe   con cincel,
       el sabio en su propia sabiduría,   4 con plata y oro lo engalanan,
       ni en su propia valentía se alabe   con clavos y martillo lo afirman
       el valiente, ni el rico se alabe en   para que no se mueva.
                   a
       sus propias  riquezas.            5 Derechos están como una pal-
                a
                                                             a
         24 Mas  alábese en esto el que   mera, y no hablan; son  llevados,
       haya de alabarse: en entenderme   porque no pueden andar. No ten-
       y conocerme, que yo soy Jehová,   gáis temor de ellos, porque ni
       que hago misericordia, juicio y   pueden hacer mal ni tienen poder
       justicia en la tierra, porque en   para hacer bien.
                    b
       estas cosas  me deleito, dice     6 No hay nadie semejante a ti, oh
       Jehová.                          Jehová; grande eres tú, y grande
         25 He aquí que vienen días,    es tu nombre en poder.
       dice Jehová, en que castigaré     7 ¿Quién no te temerá, oh Rey
               a
       a todo  circuncidado y a todo    de las naciones? Porque a ti te
       incircunciso:                    corresponde ser temido, porque
         26 a Egipto, y a Judá, y a Edom,   entre todos los sabios de las na-
       y a los hijos de Amón y de Moab,   ciones y en todos sus reinos, no
       y a todos los que están en los ex-  hay nadie  semejante a ti.
                                                  a
       tremos más remotos, que moran     8 Y todos se embrutecerán y
       en el desierto, porque todas las   entontecerán. El mismo árbol es
       naciones son incircuncisas, y toda   enseñanza de vanidades.
       la casa de Israel es incircuncisa   9 Traerán plata laminada de Tar-
       de corazón.                      sis y oro de Ufaz, obra del artífice

          23 a GEE Riquezas.     b Miq. 7:18.        5 a Isa. 46:6–7.
          24 a Alma 26:36.     25 a GEE Circuncisión.  7 a Sal. 89:6–8.
             GEE Gloria.     10 3 a GEE Tradiciones.
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