Page 1638 - Santa Biblia
P. 1638

LUCAS 7:35–8:1                                             1624
       Hombre, que come y bebe, y de-    44 Entonces, mirando a la mujer,
       cís: He aquí un hombre comilón   dijo a Simón: ¿Ves esta mujer? En-
       y bebedor de vino, amigo de pu-  tré en tu casa y no me diste agua
       blicanos y de pecadores.         para mis pies; pero ella ha regado
         35 Mas la sabiduría es justifi-  mis pies con lágrimas y los ha
       cada por todos sus hijos.        enjugado con sus cabellos.
         36 Y le rogó uno de los fariseos   45 No me diste beso, pero ella,
       que comiese con él. Y habiendo   desde que entré, no ha cesado de
       entrado en casa del fariseo, se   besar mis pies.
       sentó a la mesa.                  46 No ungiste mi cabeza con
         37 Y he aquí una mujer que ha-  aceite, pero ella ha ungido mis
       bía sido pecadora en la ciudad,   pies con perfume.
       cuando supo que Jesús estaba a    47 Por lo cual te digo que sus
       la mesa en casa de aquel fariseo,   muchos pecados le son perdo-
       trajo un frasco de alabastro con   nados, porque amó mucho; pero
       perfume,                         al que se le perdona poco, poco
         38 y estando detrás de él a sus   ama.
       pies, llorando, comenzó a regar   48 Y a ella le dijo: Tus pecados
                                              a
       con lágrimas sus pies, y los en-  te son  perdonados.
       jugaba con los cabellos de su     49 Y los que estaban juntamente
       cabeza, y besaba sus pies y los   sentados a la mesa comenzaron a
       ungía con el perfume.            decir entre sí: ¿Quién es éste, que
                                                a
         39 Y cuando vio esto el fariseo   también  perdona pecados?
                                                                    a
       que le había convidado, dijo para   50 Y Jesús dijo a la mujer: Tu  fe
       sí: Si éste fuera profeta, cono-  te ha salvado, ve en paz.
       cería quién y qué clase de mu-
       jer es la que lo toca, porque es
       pecadora.                                 CAPÍTULO 8
         40 Entonces, respondiendo
       Jesús, le dijo: Simón, una cosa
       tengo que decirte. Y él dijo: Di,   Jesús enseña la parábola del sem-
       Maestro.                         brador y la interpreta — Calma
         41 Un acreedor tenía dos deu-  la tempestad y echa fuera a una
       dores: Uno le debía quinientos   legión de demonios que en seguida
       a  denarios, y el otro cincuenta;  entra en un hato de cerdos; sana a
         42 y no teniendo ellos con qué   una mujer que padece de flujo de
       pagar, perdonó a ambos. Di, pues,   sangre y levanta de la muerte a la
       ¿cuál de éstos le amará más?     hija de Jairo.
         43 Y respondiendo Simón, dijo:
       Pienso que aquel a quien perdonó   Y ACONTECIÓ después, que
       más. Y él le dijo: Rectamente has   Jesús caminaba por todas las
       juzgado.                         a  ciudades y aldeas, predicando

          41 a O sea, un denario era   48 a DyC 64:10.  50 a Éter 12:4.
             el salario por un día   49 a GEE Remisión de   GEE Fe.
             de trabajo.          pecados.        8  1 a DyC 66:5.
   1633   1634   1635   1636   1637   1638   1639   1640   1641   1642   1643