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SALMOS 22:1–16                                              904
                 SALMO 22                   hacen muecas con los la-
                                              bios, menean la cabeza,
       Salmo mesiánico de David —             diciendo:
                                               a
       Éste predice acontecimientos de   8 Se  encomienda a Jehová;
       la vida del Mesías — El Mesías         que él lo rescate;
       dirá: Dios mío, Dios mío, ¿por qué   sálvele, puesto que en él se
       me has desamparado? — Le tras-         complacía.
       pasarán las manos y los pies —    9  Pero tú eres el que me sacó
       Aún se enseñoreará de todas las        del vientre,
       naciones.                            el que me hizo confiar desde
                                              que estaba a los pechos de
                                              mi madre.
                               a
        Al músico principal: al son de  Ajelet-
              sahar. Salmo de David.     10  A ti fui encomendado desde
                                              la matriz;
         a  DIOS mío, Dios mío, ¿por qué    desde el vientre de mi ma-
             me has desamparado?              dre, tú eres mi Dios.
            ¿Por qué estás tan lejos de mi   11  No te alejes de mí, porque la
             salvación y de las palabras      angustia está cerca,
             de mi clamor?                  y no hay quien ayude.
         2  Dios mío, clamo de día y no   12  Me han rodeado muchos
             respondes;                       toros;
            y de noche no me quedo en       fuertes toros de Basán me
             silencio.                        han cercado.
         3  Pero tú eres santo,          13  Abrieron sobre mí su boca,
            tú que habitas entre las ala-   como león rapaz y rugiente.
             banzas de Israel.           14  Derramado soy como el
                a
         4 En ti  confiaron nuestros pa-       agua,
             dres;                          y todos mis huesos se des-
            confiaron, y tú los libraste.      coyuntan;
         5  Clamaron a ti y fueron libra-   mi corazón es como cera,
             dos;                           derritiéndose en medio de
            confiaron en ti y no fueron        mis entrañas.
                                                     a
             avergonzados.               15 Como un  tiesto se ha secado
         6  Mas yo soy gusano y no            mi vigor,
             hombre,                        y mi lengua se pegó a mi
            oprobio de los hombres,           paladar;
             y  despreciado del pue-        y me has puesto en el polvo
               a
             blo.                             de la muerte.
         7  Todos los que me ven me      16  Porque perros me han ro-
             a  escarnecen;                   deado;

       22 E a HEB “La cierva de   4 a GEE Confianza,   8 a Mateo 27:43.
             la aurora”. Posible-  confiar.           15 a O sea, un trozo de
             mente indique una   6 a Lucas 22:63–65;    vasija de barro.
             tonada conocida.     Mos. 14:3–6.
          1 a Mateo 27:46.      7 a Lucas 23:35.
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