Page 162 - Águila Blanca_Neat

Los Últimos Días

408. Y más tarde, cuando él trajo a los hijos de Israel
hacia el río. Ahí estaba, en el mes de Abril, el gran río
desbordándose. El Jordán descendiendo de las montañas, y
estaba desparramado por los llanos. Parecía el peor tiempo en
el año, que él podía estar allí. Pero todavía él era Simiente de
Abraham. El sabía que tenía una promesa, y él estaba en la
línea del deber. Dios le dio a él una visión, cómo hacerlo, el
agua regresó directamente a las montañas. Y Josué e Israel
poseyeron las puertas del enemigo, y cruzaron hacia la
tierra Prometida, porque Dios les dijo que lo hicieran. ¡La
verdadera Simiente de Abraham! [EL PATRIARCA
ABRAHAM, página 6, párrafo 57. Predicado el 7 de febrero de 1964
en Bakersfield, California, E.U.A. Impreso por Traducciones y
Ediciones el Olivo, Tlalnepantla, México.]

409. Y ahora, en la visión, yo pudiera decir esto. Lo
mencioné una vez. Yo iba a cortarlo de la cinta, pero creo
que simplemente la dejaré encendida.

410. Eran como las tres de la mañana, supongo. Me había
levantado, y miré dónde, enfrente de mí, y yo venía
descendiendo al Jordán. Parecía como que estaba parado
en el mapa de Palestina, y yo venía descendiendo al Jordán.
Y a medida me iba acercando al río (73D), miré hacia atrás y
vi de qué dirección había venido yo, y yo estaba a dos
tercios del camino allí, al Jordán.

411. Y miré al otro lado del Jordán, y dije: ―¡Oh,
alabado sea Dios, justo al otro lado es donde están todas
las promesas! Toda promesa está en la Tierra
prometida”.

412. Ahora da la casualidad que se me vino esto a la
memoria. Allá el otro día, cuando yo estaba en California, y
me paré en ese desayuno de los Hombres de Negocio.

(73D) Daniel 12:5; Zacarías 4:3-14; Apocalipsis 11:3-4

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