Page 163 - El Orinoco, ilustrado, y defendido, historia natural, civil, y geographica de este gran rio, y de sus caudalosas vertientes: govierno, usos, y costumbres de los Indios sus habitadores con nuevas, y utiles noticias de animales, arboles, frutos, aceytes, resinas, yervas, y raices medicinales
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MSTóRÍA NATÜRAE. 149


      ícíríd , llamado Francifco, Mafias, hombre en'

     Forma , de brio , y de valor , grande obfety

      vador de la naturaleza , propiedades de

      plantas, y animales, y harta de los miedos,,

     fue el primero , que me dio la noticia de

     la inftantanea adivldad del Curare. Sufpendi

     mi juicio , y le remití á la experiencia. Preí-

     to ocurrió una manada de monos amarillos:

     (gran comida páralos Indios, y en fu len¬                                                Experimento

     gua fe llaman Arábate% ) todos los Indios com¬                                         hecho con to¬
                                                                                            do cuidado , y
     pañeros fe aliñaron , para matar cada uno
                                                                                            reflexión.
    quantos pudieíTe , y tomando yo un Indio
    aparte , le rogué , que flecharte uno de aque¬


    llos monos , el qual parado en pie fobre una

    oja de palma , con la mano izquierda tenia

    otra oja mas alta : dióle la punta de la rte-<

    cha en el pecho ; levantó la mano derecha*’

    que tenia colgando , e hizo ademán de que¬

   rer arrancar la flecha ; ( como lo hacen quan-t

   do las tales no tienen Curare ) pero al mif-

   mo tiempo de hacer el ademán , y fin acabar

   de llegar la, mano á la flecha , cayó muerto

   al pie de la palma : Corrí, aunque ertaba

   cerca , y no hallándole calor en lo exterior

   del cuerpo, lo mandé abrir defde el pecho Inílátanea op¡

   harta abaxo , ( ó prodigio grande de las cau- ración del Cu-

   fas ocultas que ignoramos! ) no le hallé raf- rare*

   tro alguno de calor , ni aun en el mifmo

   corazón. Al contorno de efte tenia mucha

   fangre quaxada, negra , y fria : en lo ref-

   tante del cuerpo cafi no tenia fangre , y la

   poca que le hallé en el hígado , ertaba del

   mifmo modo , que la del corazón >* y en lo

      <Parí.II. . ¡T ex- \
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