Page 67 - DIC BORRADOR
P. 67
Daniel comprende la indirecta y comienza a besarla. Desciende por el cuello y
la desviste a medida que baja, llegando a los senos, refugiándose en ellos. Los
pezones comienzan a endurecerse ante las provocaciones, tímidos gemidos
acusan que las caricias son correctas y logran producir el efecto deseado.
- Qué rico me tocas, haces que me moje de inmediato.
Una vez cumplida la misión deja los senos para recorrer su abdomen. La
lengua suavemente roza la piel generando un sutil espasmo en los músculos
abdominales. Los gemidos asoman como recompensa para los oídos de Daniel
que desciende aún mas hacia el sexo. La desprende de los pantalones y la
tanga, dejándola desnuda y abriendo las piernas para dejar la vagina a merced
de sus deseos mas eróticos. Comienza besando los pies, masajeandolos con
los dedos, besa los tobillos y usa la lengua para subir lamiendo las piernas.
Llega a los muslos donde suavemente repite lo del abdomen rozando
sigilosamente la piel de su amante, ella solo gime, disfrutando el placer que las
tocasiones en su cuerpo desnudo provoca. Besa los alrededores del sexo
rosado, húmedo debido a la excitación, hasta que sin mediar aviso, sumerge su
lengua en aquel fruto, lamiendo, besando y chupando sin descanso,
provocando intensos gemidos que delatan el placer que Victoria
siente recorriendo su cuerpo. Daniel retorna lentamente al comienzo, subiendo
por el abdomen, alcanzando los senos. Mete uno a su boca al mismo tiempo
que penetra con la punta del miembro a su cómplice... a medida que cierra la
boca la penetra más, y cuando muerde con sus dientes sensualmente el pezón,
su erección en perfecta sincronía penetra por completo el sexo de su pareja. El
estimulo genera una excitación mas allá de lo imaginado y Victoria cae rendida
al placer. Daniel repite el movimiento pero más rápido, generando un estado de