Page 6 - Revista 3ES OCTUBRE 2018- II
P. 6

La escuadra                       de      las

                                                                                                   Narices               Rojas


                                                                                         Por Nancy Peña


                                                                                            No importó que fuera domingo, ni que la
                                                                                            tarde estuviera nublada: decenas de per-
                                                                                            sonas se dieron cita el pasado 5 de agosto
                                                                                            en el Globodromo de San Agustín Ohtenco
                                                                                            para despedir el Noveno Festival de Pan-
                                                                                            tomima, Circo y Clown “La Risa Sagrada”.
                                                                                            El escenario se abrió en punto de las 5:00
                                                                                            p.m. cuando apareció Aziz Gual, quien
                                                                                            estuvo becado y se graduó en el Ringling
                                                                                            Bros and Barnum & Bailey Clown Colle-
                                                                                            ge, además de tomar clases con Marcel
                                                                                            Marceu.
                                                                                            En esta ocasión, Aziz Gual se presentó con
                                                                                            el espectáculo “De Risa en Risa”, un acto
                                                                                            de destreza circense que incluye malaba-
                                                                                            res con 4 o 5 objetos, equilibrar 3 escaleras
                                                                                            de 3 tamaños diferentes con la barbilla,
                                                                                            acompañado de música en vivo para crear
                                                                                            todo un ambiente circense. De esta forma,
                                                                                            Aziz Gual logró interactuar con el público
                                                                                            e hizo reír a niños y adultos, desde la risa
                                                                                            más sutil hasta una auténtica carcajada.
                                                                                            Además nos mostró el lado más humano
                                                                                            de ser clown, pues presentó el juego de
                                                                                            máscaras, que consistía en cambiarse
                                                                                            diversas caretas (enojada, triste, de mujer,
                                                                                            de viejo, de robot, entre otras tantas) bus-
                                                                                            cando su personalidad en esos contrastes.
                                                                                            El clímax llegó cuando tomó asiento para
                                                                                            desprenderse de sus accesorios, empe-
                                                                                            zando por su sombrero, luego el peluquín,
                                                                                            el saco y el pantalón de payaso. Tomó una
                                                                                            toalla para desteñir su rostro de colores,
                                                                                            mostrando su lado clown y su lado hu-
                                                                                            mano. Después se quitó las zapatillas, las
                                                                                            besó y miró al cielo. El público se levantó
                                                                                            de su asiento, no dejaba de ovacionarlo.
         4                                                                                                                                                         5
   1   2   3   4   5   6   7   8   9   10   11