Page 125 - SEMINARIO BIBLICO Misiones PDF
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¿Creemos que la oración puede hacer una diferencia a los planes de Dios por las
                  naciones? Vemos unos ejemplos:


                  Abraham
                  El Señor iba a destruir dos ciudades malas pero Abraham se enteró de eso y intercedió
                  varias veces para salvar la gente de dentro. Le encantó al Señor responder.
                  Génesis 18:17-33.


                  Amós
                  Cuando Amós vio que Dios exigía juicio sobre Israel, Amós le clamó, "¡Señor Soberano,
                  perdona! ¿Cómo puede sobrevivir Jacob? ¡Es tan pequeño! Y el Señor se retiró".
                  Amós 7:2-6


                  Daniel
                  Daniel supo en su corazón que era el momento de interceder en favor de la nación, y
                  lo hizo. Ves como Dios le dio una respuesta muy rápida. Daniel 9:2-23.


                  Igual Hoy También Necesitamos Fe
                  Así mismo Jesús espera que sepamos las señales y los tiempos. Mateo 16:3.

                  La Oración Forma Los Tiempos Finales.
                  En Apocalipsis 5:8 y 8:1-5, la Biblia revela que la conclusión de la historia humana está
                  en las manos del Señor Jesucristo
                  Se dice que la historia pertenece a los intercesores. En el nombre de Jesús tenemos
                  autoridad contra Satanás para frustrar sus planes, derribar sus fortalezas y librar sus
                  cautivos. Nuestras oraciones cambian nuestro mundo, abren puertas cerradas, hacen
                  que la gente resistente esté receptiva.





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                  50. La Iglesia Con Avivamiento


                  Lee Esto En La Biblia: Isaías 35; Hechos 8, 4-8


                  Un Versículo Para Memorizar
                  Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados; para que
                  vengan de la presencia del Señor tiempos de refrigerio, y él envíe a Jesucristo.
                  Hechos 3:19,20

                  En los últimos años Dios por su gracia ha mandado muchas olas de renovación a cada
                  parte de su Iglesia que acepta a su Espíritu Santo. Una renovación trae un refrigerio
                  necesario a los creyentes y aunque no es un avivamiento tal vez sea la primera brisa
                  del viento fuerte del avivamiento verdadero.



                  “LA IGLESIA DEL AVIVAMIENTO” I.E.D  MINISTERIO INTERNACIONAL               Página 125
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