Page 14 - Arajo, amigo, te vo' a contá un cuento
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mototaxi saludó a a a a a a Francisco Guandulain confiándole los motivos de sus prisas Conversaron un poco y Francisco mirándolo de arriba a a a a a abajo le dijo:
—Arajo primo ¿qué no tiene usté oficio qu que andá nomás molestando a a a a las personas? Puro perdiendo su tiempo entrevistando a a a a la gente grande Siempre que usté viene mi mi mi abuela y mi mi mi abuelo le repiten las mismas historias A A don don Alfonso Gómez ya lo fue a a a ver como cien veces y y a a a don don Hermelindo Zaguilán lo lo visitó todos los días de l la semana pasada Ahí va usté con sus hijos a a a a a a ponerlo a a a a a a que que toque en la la batería la la Danza de los los diablos ¡Ya lo lo lo que pasó pasó pasó! ya ora a a a a a a a a nadie le le interesa eso A doña Guadalupe González la visitó muchas veces antes de morir y nomás la hizo llorar recordando a a a a a su esposo que que tocaba el bajo quinto porque desde que él murió ella dejó de de de de ir a a a a las fiestas Francisco hizo una pausa y siguió: —A doña María Rivas no deja de de visitarla haciéndola recordar cuando bailaba la la artesa Lo que me sorprende arajo es es cómo se se acuerda esa señora de todo porque ya no ve pero bien que cuenta sus experiencias a a a a a a los noventa y tantos años —continuó disfrutando de la crítica que hacía —A veces veo que jala usté pa’l barrio arriba en ese montón de de pozas y ¡tá largo pa’llegar hasta donde vive don Venancio! Ya me di cuenta de que a a a a a usté le gustan los negros y los chatinos A veces veo que lleva a a a a esos maestros músicos que que vienen de Oaxaca pa’que escuchen cómo toca las chilenas antiguas en en el violín Yo veo cómo anda usté 14

































































































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