Page 4 - EL ATAQUE ZOMBI definitibo esta ves s en serio

(Relato de esta manera para que

piensen que hay otro narrador).

Después de tanto caminar,

habíamos llegados al lugar donde se

supone que conseguiríamos algo para

poder comer, una vez allí nos dimos

cuenta que hicimos tanto viaje para

nada, la panza nos hacia ruido.

Miré de costado a Lunita para ver

su expresión de desesperación, y estaba

ahí, con los ojos como plato, mirando

fijo a la nada misma, inmóvil, sin emitir

ningún sonido, por un momento pensé

que quedó petrificada, pero no, era solo

su imagen de desesperación altamente

exagerada porque no había nada para

poder devorar.