Page 286 - Historia de la civilización peruana contemplada en sus tres etapas clásicas de Tiahuanaco, Hattun Colla y el Cuzco, precedida de un ensayo de determinación de "la ley de translación" de las civilizaciones americanas
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bastante para que los que la practican sean conocidos en adelante
con los nombres de ningrizapas, ingazapas, ingas u “orejones”
Atentos a sus intereses de clase, organízanse militarmente y
obedecen, ellos también, a determinado número de rocas.
Más tarde, llegan a constituir una organización pretoriana nu-
merosa, parecida a la que alcanzó tan marcado influjo en el
imperio romano en cabeza de los Galbas, los Otones y los Yitelios.
Inca Boca, el capitán de los orejones pretorianos, encarna
aquel período de la historia cuzqueña.
Ocurre con los pretorianos de la casta orejona lo que con los
Hoques de la primera época cuzqueña.
Comienzan, obedeciendo a simples rocas y acaban obedecien-
do a yupanquis, esto es, a caudillos militares propiamente dichos.
Transcurren dos o más generaciones y un nuevo elemento de
predominio se diseña en la organización cuzqueña : el sacerdotal.
El sacerdote cuzqueño unje al que ha de reinar, eligiéndole
en las filas pretorianas o en las administrativas, según sean las
contingencias de guerra o de paz que se ofrezcan para el Estado.
Su poder se hace omnímodo.
La tercera parte de las rentas del Estado le pertenece.
Simboliza este período el inca conocido como Yahuar Huacac.
Yahuar es “ sangre” sangre en un sentido fisiológico-, y san-
;
gre, o consanguinidad, en un sentido racial.
En el caso de que tratamos expresa linaje, con relación a los
Muertos Sentados, o sea a las momias tutelares de las' diferentes
estirpes veneradas en los ceques de la ciudad imperial y puestas al
cuidado de los aillos orejones residentes en ella.
Guacay es llorar o venerar, y huacac el que llora, venera o
practica actos de veneración.
Yahuar Huacac significa “el que llora la sangre” o con más
propiedad, delante de la sangre, de que es exponente determinado
número de momias tutelares, y no el que materialmente llora san-
gre, que reza una tradición tan desprovista de sentido histórico
como de capacidad fisiológica.
Significa el sacerdote; o mejor, el cuerpo sacerdotal que es-