Page 6 - Poder y Moral
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Si la política esta en la función del
                                                                   servicio  podemos  resolver  los
                                                                   problemas  actuales  de  la
                                                                   sociedad.  Si  el  gobierno  se
                                                                   preocupara  por el bienestar de la
                                                                   nación , tendríamos un país mejor.



                                                                   Ofrecería  oportunidades  de
                                                                   desarrollo y mejoraría la calidad de
                                                                   vida  de  los  habitantes,  pero  si  el
                                                                   estado esta en función de servirse
                                                                   a s i m i s m o ,       s u r g e     c o m o
         consecuencia el bien estar de unos pocos y el resto sometido a condiciones
         inhumanas y a limitaciones.


         Quien  sirve  al  bien  común  no  mira  su  propio  bienestar,  se  preocupa  por  el
         bien  de  la  comunidad  que  se  le  ha  confiado,  obedeciendo  a  los  criterios
         morales. Cuando el proceso político toma un camino contrario al bien común
         se llega a situaciones de ansia de poder, de ser alguien que maneje todo, y
         olvida los demás.



         El ejercer el sufragio muchas veces se vuelve un condicionamiento, por parte
         del  bipartidismo.  El  proceso  electoral  se  vuelve  una  competencia,  de  ver
         quien es el que alza mas alto la bandera de un color.


         Los partidos políticos tienen la tarea de organizar la formación de una opinión
         política  y  de  ser  instrumentos  para  que  se  lleve  a  cabo  una  amplia
         participación política de  todos los ciudadanos. Que no se convierta en una
         guerra ideológica de colores.



         La  formación  política  debe  seguir  un  proceso  y  una  concientización  que
         pueda  garantizar  la  objetividad  y  libertad.    La  objetividad  tanto  como  la
         libertad son elementos fundamentales constituyentes del bien común. De no
         seguirse en un proceso se hace vulnerable la dignidad de la persona. Si se
         condiciona a la persona se violenta su derecho como ciudadano y solo se ve
         como un instrumento para lograr un puesto y luego olvidar a las personas.
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