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Esta cuota anual de amortización contablemente se llama “dotación para
amortizaciones”.
Otros ingresos y gastos de explotación. Son todos los ingresos y gastos de la
explotación que no se pueden incluir en ninguno de los grupos anteriores; por ejemplo,
las subvenciones de explotación.
Ingresos y Gastos financieros. En esta partida se incluyen todos los gastos e ingresos
financieros de la empresa. De este modo, no solamente se han de imputar todos los
gastos bancarios (intereses y comisiones), sino también los intereses financieros
cobrados por la empresa.
Otros gastos e ingresos. Son los que no guardan una relación directa con la actividad
típica de la empresa, ni cabe esperar que vayan a producirse periódicamente ni de
forma habitual;
Impuesto de sociedades. Es el impuesto sobre el beneficio del período.
A partir de los grupos anteriores, la cuenta de pérdidas y ganancias se estructura de la
siguiente forma:
El margen bruto se calcula teniendo en cuenta los siguientes conceptos:
El consumo de las existencias o coste de las ventas se valoran a partir de las compras
realizadas durante el ejercicio y de la variación de existencias que se ha producido entre
el inicio y el cierre de dicho ejercicio, en función de la fórmula siguiente:
Consumo = compras + existencias iniciales – existencias finales
El resultado retenido (beneficio no distribuido) formará parte de los fondos propios de
la empresa y se contabilizará dentro de las partidas de reservas.
Estas reservas reforzarán la autofinanciación de la empresa, incrementando su valor
de una forma u otra, ya sea mediante el aumento de valor de sus activos (compra de
inmovilizado, existencias o más saldo en bancos), o mediante la disminución de su
pasivo exigible, reduciendo la deuda con terceros.
Generalmente, los propietarios de una empresa invierten en ella para obtener una
rentabilidad suficiente; por lo tanto, esta ratio permite medir la evolución del principal
objetivo del inversor.
Cuanto mayor sea esta ratio, mayor será la rentabilidad para el accionista o propietario
de la empresa. En cualquier caso, como mínimo ha de ser positiva y superior o igual a
las expectativas de los accionistas.