Page 48 - Mib 336 Octubre 2020
P. 48

                #alimentacióncomplementaria
  1QUÉ HAY QUE TENER EN CUENTA
¿Qué es el Baby Led Weaning?
El Baby Led Weaning es un método para introducir alimentos sólidos en la dieta del bebé. Se puede realizar a partir de los seis meses si el pequeño se muestra interesado y tiene un grado de madurez suficiente: por ejemplo, debe ser capaz de mantenerse sentado y sin apoyo, y debe haber perdido el reflejo de extrusión, es decir, el reflejo de expulsar con la lengua el alimento fuera de la boca.
• El Baby Led Weaning consiste en ofrecer al pequeño alimentos en forma de trocitos, para que él solito pueda cogerlos con las manos, llevárselos a la boca, manipularlos y experimentar con ellos. Es importante darle alimentos blandos y cocinados, que el pequeño pueda aplastarlos fácilmente con la lengua o con las encías, por ejemplo, zanahoria cocida, brócoli, arroz, patata, sandía, etc. En cambio, se deben evitar los alimentos muy duros, como las aceitunas, los frutos secos enteros, la manzana o la zanahoria cruda, pues existe
el riesgo de que el pequeño se pueda atragantar.
• Los beneficios de esta práctica son muchos. Según los expertos, con este método, el bebé aprende a comer solito y a controlar su apetito, ya que es él quien decide la cantidad de alimento que ingiere (no se le obliga a comer), lo que puede ayudar a prevenir el sobrepeso infantil. Además,
el pequeño disfruta del verdadero sabor y de la textura de los alimentos; se fomenta en él un interés sano por la comida y por probar cosas nuevas, haciendo que su dieta sea variada. Asimismo, este método facilita el aprendizaje de
la masticación y el desarrollo de la coordinación ojo-mano.
La fuente básica de lácteos del bebé debe
ser la leche materna o, en su defecto, la fórmula de continuación. Hay que recordar que la leche sigue siendo el alimento principal del bebé durante
6el primer año de vida.
La dieta debe ser equilibrada y no hay que favorecer un exceso de proteínas, pues su
consumo elevado se relaciona con un aumento de la obesidad infantil. Las proteínas deben suponer entre un 12-15% de la dieta diaria y deben tener un origen no solo animal, sino también vegetal (por ejemplo, 7legumbres).
No hay que añadir sal ni azúcar a la comida,
para acostumbrar al bebé al sabor natural de los alimentos y no fomentar en él una especial predisposición hacia la comida dulce o salada. Asimismo, se deben evitar los precocinados, embutidos o bollería.
Al principio, el alimento debe triturarse o rallarse,
para adecuarlo a la capacidad de deglución y de masticación de los más pequeños. Después, se le podrán ofrecer texturas cada vez más sólidas, hasta darle trocitos o alimentos enteros, que el pequeño 2pueda morder y chupar.
Es importante empezar por pequeñas dosis, para
que el bebé se acostumbre poco a poco al nuevo 3sabor, e ir aumentando poco a poco la cantidad.
Se recomienda no introducir varios alimentos a
la vez, sino dejar esperar unos días entre ellos. No hay que preocuparse si el bebé rechaza un nuevo alimento; a veces, será necesario ofrecérselo varias 4veces para que el pequeño acabe aceptándolo.
Se deben tener en cuenta las necesidades de
cada bebé, sus tiempos y modo de aprendizaje.
Hay que respetar las señales de hambre y de saciedad del niño; nunca hay que forzarle a comer.
5
#48# Mibebeyyo








































































   46   47   48   49   50