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Un campo

sin campesinos

De la redacción.
el agro entró en una crisis de

reproducción de la economía
campesina. La crisis de la deuda y los

procesos de globalización, apertura
comercial llevaron a que en los
noventas el papel del campo se
c e n t r a r a e n l o s m e r c a d o s ,

abandonando la idea de políticas de
desarrollo sectorial; las intervenciones

al campo en la primera década de este
siglo han estado orientadas en
administrar la pobreza.
En México el que más trabaja es el que menos gana, el modelo

de distribución de la riqueza es uno de los peores en el mundo. Con el argumento de que el campo estaba generando sólo un
El sector rural, enfrenta graves problemas de desigualdad, pequeño aporte económico al Producto Interno Bruto (PIB)
sufre en cuanto a las crisis a pesar de ser el sostén de la a fines de la década de 1980 y principios del decenio de 1990,

estructura económica; el estilo de vida del campesino los regímenes de Miguel De la Madrid y Carlos Salinas le
empeora cada vez más, retrocede en lugar de avanzar. La dieron la espalda al agro quitando abruptamente gran parte
población rural se estima actualmente en 24.5 millones de de los subsidios oficiales a la producción agrícola y los apoyos

personas. De ellas, 10.7 millones pertenecen a lo que se llama para la infraestructura productiva, sin siquiera saber con
población económicamente activa, pero sólo 3.1 millones de certeza si funcionaría el nuevo modelo de desarrollo
productores son dueños de un pedazo de tierra. Más de la económico para el sector rural.

mitad de los mexicanos viven en condiciones de
pobreza la que agrava la situación de quienes
habitan en el campo.

Al campo mexicano se le exigió entre 1940 y 1970

las tres contribuciones básicas de la agricultura:
divisas, salarios bajos y mano de obra barata.
Cumplió con creces siendo un sostén crucial para
el crecimiento económico. A fines de los sesentas

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