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misoras de saberes y conocimientos, responsables en
Rol de la mujer
en el manejo, aprovechamiento y uso
de la piangüa.
Los más de cuatro siglos de esclavización, llevó a
los afrodescendientes a perder el vínculo físico de
su territorio y su comunidad. Sin embargo, aún
bajo estas condiciones de vida, se gestaron gran va-
riedad de formas de resistencia, que permitieron la
pervivencia de tradiciones culturales que hoy ha-
cen parte del importante legado cultural del pue-
blo afrocolombiano heredado de sus ancestros.
En el caso particular de las mujeres africanas, el hecho
de que en los tiempos de esclavización fuera constan-
te la presencia de un tercio de mujeres por dos tercios
de hombres, ubicó a las mujeres en una situación de
sobre-explotación y desprotección viviendo de mane-
ra permanente todas formas de violencia. Pese a esta
situación, las ancestras africanas fueron el soporte de
liberación del pueblo negro en la construcción de las
sociedades cimarronas: suministrando información,
armas y alimentos, generando terrorismo psicológico
en los esclavistas, e incluso utilizando su cuerpo para
distraerlos y permitir la fuga de los negros cimarrones.
Conscientes que hoy, las mujeres negras siguen sien-
do pilar fundamental en la existencia, re-existencia y
resistencia del pueblo afrocolombiano como trans-
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la conservación para la sostenibilidad de los recursos
naturales (selecciona semillas, define rutas, determi-
na tiempos, crea técnicas, educa y transforma, entre
otras tareas) y cuidadoras de la vida, es de trascen-
dental importancia diseñar e implementar acciones
basadas en potenciar su papel en la articulación de
sistemas productivos, la conservación ambiental y la
protección cultural comunitaria; en el ppacífico cau-
cano su rol está marcado en la transmisión de los valo-
res culturales y de la conservación de la biodiversidad.
La relación de las mujeres negras del pacifico cauca-
no, con relación al manglar, está determinada por su
forma particular de concebir el mundo y el bienestar,
así como su decidido compromiso en asumir las ac-
ciones para la salvaguarda de su territorio, ello les ha
permitido desarrollar sorprendentes habilidades en la
agricultura, pero especialmente para la captura de es-
pecies de río y mar, como lo son las cangrejeras, jaibe-
ras, camaroneras, chorgueras, almejeras y piacuileras.
Encontramos en Guapi a María Angulo en la galería
vendiendo toda especie de mariscos, a Dionisia Solís
pescadora y vendedora de jaiba, a pepa y Berenice con-
cheras de Quiroga, Doris en Guapi abajo, en fin, son un
sinnúmero de mujeres referente cultural de la región.
Gracias a estas mujeres dedicadas a estas pe-
ligrosas faenas de pesca, a las comercializado-
ras e inclusive a las preparadoras de los alimen-
tos, podemos degustar a diario los diversos y
apetecidos platos típicos preparados a base de pes-
cados y mariscos que caracterizan la región Pacífico.
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