Page 18 - Corazones Reales
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CR: Buenos días, Enrique, muchísimas gracias por invitarnos a su casa y concedernos esta entrevista.
EN: ¡Buenos días, el placer es mío!
CR: En primer lugar, permítame decirle que tiene un palacio precioso. ¿Lo ha decorado usted?
EN: ¡Gracias! ¡Me alegra que le guste! Pues sí, aunque mis esposas han dejado su toque en alguna de las estancias, este palacio es “la niña de mis ojos”. Desde que en 1529 se lo arrebaté al Cardenal Thomas Wolsey, he ido reformándolo poco a poco. Por aquí han pasado los mejores artesanos y jardineros de Europa. Me ha costado una fortuna, pero ha merecido la pena. Gracias a su trabajo hoy el palacio cuenta con un salón enorme (Great Hall) ideal para celebraciones y con unas cocinas súper espaciosas para albergar a todo el personal de palacio. También estoy muy orgulloso de los tapices que cubren los muros de la mayoría de las estancias; los elegí personalmente


































































































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