Page 100 - Cómo aprendimos a volar (II Edición)
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a distancia. Mi ñaña* mayor ya había salido a buscar trabajo en la ciudad, desafiando tam- bién los paradigmas familiares; ella fue un pilar fundamental en la búsqueda de preparación académica de mis demás ñañas y ñaños. Mi sueño, el hilo que sujetaba mi cometa ahora, era ser profesional.
En ese camino de tanto esfuerzo y valentía, todo se detuvo cuando encontré una pareja. ¡Bellos momentos!, ¡cómo nos apoyaría-
mos!, ¡cómo haría-
mos la vida juntos!,
¡cómo viviríamos!
Solo que tal vez en ese
momento no asimi-
laba aún todo lo que significaba, y a la res- ponsabilidad que me
llevaba. Dejando atrás el sueño académico, regresé a la comu- nidad a cumplir el rol de esposa y mamá. Esta nueva etapa pasó de ser una ilusión a una aluci- nación, no estuve conforme con esta nueva realidad, me sentía fatal, mi sueño se quedó atrás. El nuevo hilo para sujetar mi porve- nir eran mis hijas.
Fue muy difícil encaminar de nuevo mi vida y mis sueños. Los
* Kichwa: hermana.
paradigmas sociales y familia- res nos siguen como fantasmas, sembrando tristeza, desespe- ración, inseguridad, maltrato, celos y humillación a las muje- res, en especial a las de mi rea- lidad. Las creencias culturales, los condicionamientos y concep- tos falsos son muy pesados.
A pesar de todo esto, una voz interna siempre estaba repitién- dome “tú no eres así, no eres esa persona agotada, triste, enferma, culpable”. Era como estar en una
pesadilla, quería des- pertar, pero era muy difícil. Enfrentarme a cambiar esta realidad significaba enfren- tarme a creencias propias y sociales, a falsos conceptos del papel de la mujer, a
diferencias sociales y a la des- igualdad de condiciones. Era enfrentarme conmigo misma, con mi pareja, con la comunidad y con la sociedad misma.
El sueño de prepararme no había quedado de lado; la comu- nidad también es una universi- dad, las mamas y taytas tam- bién son grandes maestros, así como las hijas e hijos.
Creo que la intención y el deseo se cumplen mientras
“Mi sueño, el hilo que sujetaba mi cometa ahora, era ser profesional”
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