Page 1537 - Biblia el Unico Dios
P. 1537

 2 Saben, en efecto, las instrucciones que les dimos de parte del Señor Jesús.
3 Lo que Dios quiere es que ustedes lleven una vida santa, que nadie cometa inmoralidades sexuales
4 que cada uno de ustedes sepa dominar su propio cuerpo en santidad y honor, 5 y no dominado por la pasión, como hacen los gentiles que no conocen a Dios. 6 Que nadie falte a su hermano ni se aproveche de él en este punto, porque el Señor se vengará de todo esto, como lo dijimos ya y lo atestiguamos,
7 porque no nos llamó Dios a la impureza, sino a la santidad.
8 Así que, el que esto desprecia, no desprecia a un hombre, sino a Dios, que también nos dio de su Espíritu Santo.
9 En cuanto al amor entre hermanos, no tienen necesidad de que les escribamos, porque Dios mismo les ha enseñado a amarse unos a otros.
10 Y lo practican bien con los hermanos de toda Macedonia. Pero les exhortamos, hermanos, a que continúen practicándolo más y más,
11 y a que procuren vivir en tranquilidad, y ocupados en sus propios asuntos, y trabajando con sus manos, como lo tenemos ordenado,
12 a fin de que vivan dignamente ante los de fuera, y no tengan que de pender de nadie.
La venida del Señor
13 Hermanos, no queremos que estén en la ignorancia respecto de los muertos, para que no se entristezcan como los demás, que no tienen esperanza.
14 Porque si creemos que Jesús murió y que resucitó, de la misma manera Dios llevará consigo a quienes murieron en Jesús.
15 Les decimos esto como Palabra del Señor: Nosotros, los que vivamos, los que quedemos hasta la Venida del Señor no nos adelantaremos a los que murieron. 16 El Señor mismo, a la orden dada por la voz de un arcángel y por la trompeta de Dios, bajará del cielo, y los que murieron en el Señor Jesús resucitarán en primer lugar.
17 Después nosotros, los que vivamos, los que quedemos, seremos arrebatados en las nubes, junto con ellos, al encuentro del Señor en los aires. Y así estaremos siempre con el Señor.
18 Anímense, mutuamente con estas palabras.
1 Tesalonicenses 5
1 En lo que se refiere al tiempo y al momento, hermanos, no tienen necesidad que les escriba.
2 Ustedes mismos saben perfectamente que el Día del regreso del Señor ha de venir como un ladrón en la noche.
3 Cuando digan: «Paz y seguridad», entonces hay mismo, de repente, vendrá sobre ellos destrucción repentina, como los dolores de parto a la que está encinta; y no escaparán.
















































































   1535   1536   1537   1538   1539