Page 228 - Biblia el Unico Dios
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3 y se estremeció Moab tuvo gran temor ante el pueblo, era muy numeroso. Tuvo miedo Moab de los israelitas
4 y dijo a los ancianos de Madián: «Ahora verán cómo esa multitud va a devastarlo todo a nuestro alrededor, como devasta el buey la hierba del campo.» Balac, hijo de Zipor, era rey de Moab por aquel tiempo.
5 Envió mensajeros a buscar a Balaam, hijo de Beor, quien se encontraba en Petor junto al Río Eufrates, en tierra de los hijos de Amav, para decirle: «He aquí que el pueblo que ha salido de Egipto ha cubierto la superficie de la tierra y se ha establecido frente a mí.
6 Ven por favor, maldíceme a ese pueblo, porque es más fuerte que yo, a ver si puedo vencerle y lo arrojo del país. Yo sé que el que tú bendices queda bendito y el que maldices, será maldito.»
7 Entonces los mensajeros de Balac y los ancianos de Moab y de Madián, partieron con el dinero para pagarle a Balaam a fin de que maldijera a Israel. Llegaron donde estaba Balaam y le transmitieron el mensaje de Balac.
8 El les contestó: «Pasen aquí la noche y les responderé según lo que me diga el Señor (יהוה).» Los jefes de Moab se quedaron en casa de Balaam.
9 Y vino el Señor (יהוה) donde Balaam y le dijo: «¿Qué hombres son ésos que están en tu casa?»
10 Le respondió Balaam a Dios: «Balac, hijo de Zipor, rey de Moab, me ha enviado a decir:
11 El pueblo que ha salido de Egipto ha cubierto la superficie de la tierra. Ven y maldícemelo, a ver si puedo vencerlo y expulsarlo.»
12 Pero dijo Dios a Balaam: «No vayas con ellos, no maldigas a ese pueblo porque es bendito.»
13 Se levantó Balaam de madrugada y dijo a los jefes de Balac: «Vayan a su tierra, porque el Señor (יהוה) no quiere dejarme ir con ustedes.»
14 Se levantaron los jefes de Moab, volvieron donde Balac y le dijeron: «Balaam se ha negado a venir con nosotros.»
15 Balac envió otra vez jefes en mayor número y más ilustres que los anteriores. 16 Fueron donde Balaam y le dijeron: «Así dice Balac, hijo de Zipor: No rehuses, por favor, venir a mí,
17 que te recompensaré con grandes honores y haré todo lo que me digas. Ven, por favor, y maldíceme a ese pueblo.»
18 Respondió Balaam a los siervos de Balac: «Aunque me diera Balac su casa llena de plata y oro, no podría traspasar la orden del Señor (יהוה) mi Dios en nada, ni poco ni mucho.
19 Quédense aquí también ustedes esta noche y averiguaré qué más me dice el ».)יהוה( Señor
20 Y vino Dios donde Balaam por la noche y le dijo: «¿No han venido esos hombres a llamarte? Levántate y vete con ellos. Pero has de cumplir la palabra que yo te diga.»
El ángel y el asna de Balaam

















































































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