Page 253 - Biblia el Unico Dios
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2 Once son las jornadas desde el Horeb, por el camino del monte Seír, hasta Cadés Barnea -.
3 El año cuarenta, el día uno del undécimo mes, habló Moisés a los israelitas exponiendo todo cuanto el Señor (יהוה) le había mandado respecto a ellos.
4 Después de derrotar a Sehón, rey de los amorreos, que moraba en Hesbón, y a Og, rey de Basán, que moraba en Astarot y en Edreí,
5 al otro lado del Jordán, en el país de Moab, Moisés comenzó a dar las siguientes instrucciones:
6 El Señor (יהוה), nuestro Dios, nos habló así en el Horeb: «Ya han estado bastante tiempo en esta montaña.
7 ¡En marcha!, vayan y entren en la montaña de los amorreos, y donde todos sus vecinos del Arabá, la Montaña, la Tierra Baja, el Négueb y la costa del mar; en la tierra de Canaán y el Líbano, hasta el río grande, el río Eufrates.
8 Yo les he entregado la tierra; vayan y tomen posesión de la tierra que yo, el Señor (יהוה), juré dar a los antepasados de ustedes, es decir, a Abraham, Isaac y Jacob, y a sus descendientes.”
Nombramiento de jueces
(Ex. 18. 13- 27)
9 Yo les hablé entonces y les dije: «No puedo cargar con todos ustedes yo solo. 10 El Señor (יהוה), su Dios, los ha multiplicado y son ahora tan numerosos como las estrellas del cielo.
11 El Señor (יהוה), el Dios de sus padres, los aumente mil veces más todavía y los bendiga como lo ha prometido.
12 Yo solo, sin embargo, no puedo llevar la pesada carga de atender todos sus problemas y pleitos.
13 Por lo tanto, escojan de cada tribu hombres sabios, inteligentes y experimentados, para que yo los ponga como jefes de ustedes.»
14 Me respondieron: «Está bien lo que propones hacer.»
15 Entonces tomé de cada tribu de ustedes, hombres sabios y experimentados, y los hice jefes de ustedes: jefes de millar, de cien, de cincuenta y de diez, así como escribas para sus tribus.
16 Y di entonces esta orden a sus jueces: «Escucharan lo que haya entre sus hermanos y administraran justicia entre un hombre y su hermano o un forastero. 17 No harás en juicio acepción de personas, escucharan al pequeño lo mismo que al grande, no tendrán miedo al hombre, porque la sentencia es de Dios. El asunto que les resulte demasiado difícil, me lo remitirán a mí, y yo lo oiré.»
18 Yo les prescribí entonces todo lo que tenías que hacer.
Misión de los doce espías
(Nm. 13. 1- 33)
19 Partimos del Horeb y fuimos por ese enorme y temible desierto que han visto, camino de la montaña de los amorreos, como el Señor (יהוה) nuestro Dios nos había mandado, y llegamos a Cadés Barnea.
)יהוה( Yo les dije: «Ya han llegado a la montaña de los amorreos que el Señor 20 nuestro Dios nos da.