Page 37 - Biblia el Unico Dios
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29 de que no nos harás mal, como tampoco nosotros te hemos tocado a ti; no te hemos hecho sino bien, y te hemos dejado ir en paz, ¡oh bendito de Dios!”»
30 El les dio un banquete, y comieron y bebieron.
31 De madrugada, se levantaron y se hicieron mutuo juramento; luego Isaac les despidió, y se fueron en paz de su lado.
32 Aquel mismo día llegaron unos siervos de Isaac y le dieron la noticia del pozo que habían cavado, diciéndole: «Hemos hallado agua.»
33 El lo llamó Seba, de donde el nombre de la ciudad de Berseba, hasta la fecha. 34 Cuando Esaú tenía cuarenta años, tomó por mujeres a Judit, hija de Beerí el hitita, y a Basemat, hija de Elón el hitita,
35 las cuales fueron amargura para Isaac y Rebeca.
Génesis 27
Jacob obtiene la bendición de Isaac
1 Como hubiese envejecido Isaac, y no viese ya por tener debilitados sus ojos, llamó a Esaú, su hijo mayor: ¡Hijo mío!» El cual le respondió: «Aquí estoy.» 2 Ya ves que estoy muy viejo dijo Isaac e ignoro el día de mi muerte.
3 Así que, toma tus saetas, tu aljaba y tu arco, y sal al campo y me cazas algún animal.
4 Prepara luego un guisado sabroso, como a mí me gusta, y tráelo para que yo lo coma. Entonces te daré mi bendición antes de morir.
5 Ahora bien, Rebeca estaba escuchando la conversación de Isaac con su hijo Esaú. - Esaú se fue al campo a cazar algún animal para el padre,
6 y entonces Rebeca dijo a su hijo Jacob: «Acabo de oír a tu padre que hablaba con tu hermano Esaú diciendo:
7 Tráeme caza, y hazme un guiso sabroso para que yo lo coma y te bendiga delante de Dios antes de morirme.
8 Pues bien, hijo mío, hazme caso en lo que voy a recomendarte.
9 Ve al rebaño y tráeme de allí dos cabritos hermosos. Yo haré con ellos un guiso sabroso para tu padre como a él le gusta,
10 y tú se lo presentas a tu padre, que lo comerá, para que te bendiga antes de su muerte.»
11 Jacob dijo a su madre Rebeca: ¡Pero si mi hermano Esaú es velludo, y yo soy lampiño!
12 Si mi padre llega a tocarme y me reconoce, va a pensar que me estoy burlando de él; entonces haré que me maldiga en lugar de que me bendiga.
13 Pero su madre le contestó: Hijo mío, que esa maldición recaiga sobre mí. Tú haz lo que te digo y tráeme esos cabritos.
14 Jacob fue por los cabritos y se los trajo a su madre. Ella preparó entonces un guisado sabroso, como a Isaac le gustaba,
15 Después tomó Rebeca ropas de Esaú, su hijo mayor, que estaba guardada en la casa, y se la puso a Jacob, su hijo menor.