Page 977 - Biblia el Unico Dios
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Judá será llevada en cautiverio
.)יהוה( Oigan y escuchen, no sean altaneros, porque habla el Señor 15
16 Honren al Señor (יהוה) su Dios, antes que él haga llegar la oscuridad y tropiecen ustedes en los montes tenebrosos; antes que él convierta en tinieblas, en pesada sombra, la luz que ustedes esperaban.
17 Pero si no le oyen, en silencio lloraré por ese orgullo, y dejarán caer mis ojos .)יהוה( lágrimas, y verterán copiosas lágrimas, porque va cautiva la grey del Señor 18 Di al rey y a la Gran Dama: Humíllense, siéntense, porque ha caído de sus cabezas su corona preciosa.
19 Las ciudades del Neguev están cercadas, y no hay quien abra. Todo Judá es deportado, deportado en masa.
20 Alza tus ojos, Jerusalén, y mira a los que vienen del norte. ¿Dónde está la grey que se te dio, tus preciosas ovejas?
21 ¿Qué dirás cuando te visiten con autoridad sobre ti? lo que tú les enseñabas a hacer sobre ti eran caricias. ¿No te acometerán dolores como de mujer que esta de parto?
22 Pero acaso digas en tus adentros: «¿Por qué me ocurren estas cosas?» Por tu gran culpa han sido alzadas tus faldas y han sido forzados tus calcañales.
23 ¿Muda el etíope su piel, o el leopardo sus pintas? ¡También ustedes pueden entonces hacer el bien, los habituados a hacer el mal!
24 Por eso los esparcí como paja liviana al viento que pasa.
25 Esa es tu suerte, el tanto por tu medida que te toca de mi parte dice el Señor .Porque te olvidaste de mí y pusiste tu confianza en falsos ídolos :)יהוה(
26 También yo te he levantado las faldas sobre tu rostro, y se ha visto tu indecencia.
27 He visto tu pasión, tus adulterios, tu vergonzosa conducta de prostituta,
tus repugnantes acciones en las colinas y en los campos. ¡Ay de ti, Jerusalén!,
¿cuánto tiempo seguirás estando impura?»
Jeremías 14
Mensaje con motivo de la sequía
1 Palabra del Señor (יהוה) a Jeremías, a propósito de la sequía.
2 «Judá llora de tristeza, sus ciudades están afligidas, la gente está tendida por el suelo. Jerusalén lanza gritos de dolor.
3 Sus nobles mandaban a los pequeños por agua: llegaban a los aljibes y no la encontraban; volvían con sus cántaros vacíos. Quedaban confundidos y avergonzados y se cubrían la cabeza.
4 El suelo está consternado por no haber lluvia en la tierra. Confusos andan los labriegos, se han cubierto la cabeza.
5 Hasta la cierva en el campo parió y abandonó, porque no había césped.
6 Los asnos monteses se paraban sobre las alturas, aspiraban el aire como chacales, tenían los ojos consumidos por falta de hierba.