Page 216 - El Orinoco, ilustrado, y defendido, historia natural, civil, y geographica de este gran rio, y de sus caudalosas vertientes: govierno, usos, y costumbres de los Indios sus habitadores con nuevas, y utiles noticias de animales, arboles, frutos, aceytes, resinas, yervas, y raices medicinales
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2oi EL ORINOCO ILUSTRADO,

                             circular, v. gr. en un fiero nublado, fino


                             fe abren páíío con eftallido , y trueno recio,

                             ( que es io mas ordinario ) cede , y dá de si

                             lo mas condenfo del nublado , al Ímpetu del

                              remolino , que baxa con la Manga hafta el

                              agua , fin perder , ni difminuir íu movimien¬

                             to circular : allí, coa la accefsion de Ios- va¬

                              pores crafos , y húmedos , toma el turbiilón

                              por la ¡upemcie exterior mas cuerpo , fe en*

                              Cancha , y coníblida ; y al mifmo tiempo , pot

                              la parte interior , fe purifica , dilata , y futí-

                              liza el ayre encerrado , en virtud del conti¬

                              nuo movimiento , y agitación violenta , de-

                               xando en el contorno interior de la manga

                              embebidas las partículas mas eradas. En efte

                               eítado , quanto mas fútil, y dilatado queda

                               el ayre interior , tanto mas tira a fublimarfe,

                               y tras de él el agua, para evitar el vacuo, que

                               tanto aborrece la naturaleza.

                                      Según efte diíTeño , puede el curiofo phi-

                               lofoíar acerca de la virtud atrahente del Buio,

                               guardando la debida proporción , y figurarfe,

                                ( fin juicio temerario ) que de las fauces del

                                culebrón íale un turbillón de efluvios malig-j

                                nos; cuyo centro , defpues que ha inficiona-;

                                do al paciente, buelve con fuerza acia la fuen*

                                te de donde dimanó , que es e! Buio , atrayen¬

                                do ia prefa al modo que la manga dicha atrahe

                                al agua : penfamiento , que fe confirma, vien¬

                                 do , que a (si como el único remedio de los

                                 navegantes es romper á cañonazos el ayre , y

                                 co'n éí ia coluna , que formo el remolino , afsi

                                 m las Americas, y en los demás Palies, que

                                                                                                              ar-
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