Page 84 - Conversión en Piritú (Colombia) de Indios Cumanagotos y Palenques, con la práctica que se observa en la enseñanza de los naturales en lengua cumanagota
P. 84

64             RUIZ BLANCO
          nen gran miedo; le llaman Iberoquiamo; atribú-
          yenle todas sus enfermedades,  trabajos é infor-
          tanios, y así, cuando llaman  á los hechiceros
          para que los curen, es para que echen al demo-
          nio de casa que con eso se irá la enfermedad;
                                                y
          ellos las más veces los engañan y se meten unas
          piedrecillas en  la boca que arrojan luego con
          con cantidad de flemas en la mano, y las arrojan
          fuera de casa y les hacen creer con aquello que
          ya se fué el demonio, y con eso quedan conso-
          lados, aunque con la enfermedad en el cuerpo.
          Confiesan la inmortalidad de las almas  y que en
          separándose de  los cuerpos van á otro lugar;
          unas á sus heredades y las más á una laguna que
          llaman Machira, á donde se las tragan unas cu-
          lebras, que hay muy grandes, y  las pasan á una
          tierra de placer, á donde se entretienen en bai-
          les y otras fiestas. Debe ser aquella laguna Esti-
          gia, que fingieron  los poetas; yerran más en
          esto, que entienden que las almas de los irracio-
         nales son inmortales también. Cuando el indio
         trae algún venado ó jabalí del monte, sale la
         mujer con una tutuma de la bebida que hacen
         del maíz y le abre la boca al animal y le da de
         beber por agasajo, para que  el alma de aquel
         refiera á los otros el buen trato que  lo han he-
         cho. Cuando paren las mujeres, los maridos no
         salen á trabajar al monte algunos días porque
   79   80   81   82   83   84   85   86   87   88   89