Page 203 - Cómo no escribir una novela
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EPÍLOGO
¡Enhorabuena! Si nos has seguido hasta aquí has pasado de ser simplemente un
novelista que aún no ha publicado a un novelista claramente convencido de no publicar
jamás. Reforzado con una armadura frente a la incomprensión y las ofensas, puedes
reírte ahora de la amenaza de que te publiquen. Podrás dormir bien tranquilo por las
noches sabiendo que nadie relacionado contigo por sangre, matrimonio o vínculo
fraternal leerá nunca tu libro, no hablemos de que te lo publiquen.
Puedes secuestrar al señor Harper y al señor Collins, pero no tendrás la menor
posibilidad de que ninguno de sus empleados pague jamás un rescate que suponga
publicar un libro en el que aparezca tu nombre. Si el señor Random está como loco por
irse a la cama contigo, el señor House tomará cartas en el asunto y se asegurará de que
no se publique tu novela. Puedes ser todo lo nórdico que quieras —el mismo Erik el
Rojo— pero los editores de Viking Press preferirán arder en el Valhalla con un drakkar
en llamas antes que publicar tu libro.
Etc.
Y ahora, libre de la amenaza de que unos lectores profesionales examinen tu libro,
puedes desarrollar por entero toda la majestuosidad natural de tu voz narrativa. La
sagrada autenticidad de tu inspiración nunca se verá mancillada por las sucias garras
del comercio.
Esperamos que nos hayas visto como algo más que unos sabelotodos del oficio de
escribir, esperamos que hayamos sido tus liberadores, tu Espartaco, tu Che Guevara de
los sabelotodos que escriben manuales sobre cómo escribir.
Sin embargo, si rechazas aviesamente todas las lecciones que te hemos ofrecido en
este libro, pues ésa era nuestra intención, y en vez de eso evitas todos los errores que
hemos descrito, quizás puedas convertirte en un novelista publicable. Si ése el caso,
nuestro siguiente libro, Cómo no vivir sin un sueldo, te será indispensable. En él te
ofreceremos instrucciones detalladas paso a paso para robar rollos de papel higiénico
de los aseos públicos; reviviremos el arte de la Gran Depresión de subsistir con sobres
gratis de ketchup y azucarillos; y te daremos una lista de las mejores tácticas para pedir
prestado dinero en la primera cita. Si estás intentando vivir ya de los anticipos de los
editores, encontrarás muy beneficioso nuestro capítulo sobre qué cajas de cartón son
mejores para el clima imperante en tu ciudad.
Pero sea cual sea el camino que escojas, la solitaria autopista de los autores no