Page 67 - En nombre del amor
P. 67

NICHOLAS SPARKS En Nombre del Amor
ante el balanceo, sorprendida al constatar el gran tamaño de la embarcación. Era mucho más larga que la barca de esquí náutico de Travis —más o menos, un metro y medio más—, con banquetas a ambos lados, el espacio donde la mayoría de los niños y los adultos se habían instalado. Stephanie y Allison («el allosauro enorme») se habían acomodado en la parte delantera de la barca. «En la... ¿popa? ¿La proa?», se preguntó Gabby, y acto seguido sacudió la cabeza. Bueno, en la parte delantera. En la parte trasera había una enorme plataforma y un cigüeñal, junto a Travis, que permanecía detrás del timón. («El G. I. rubio») Joe estaba desatando la cuerda que mantenía la barca en su sitio, mientras Laird («alarido») la enroscaba. Un momento más tarde, Joe se colocó cerca de Travis, mientras Laird se acercaba a Josie («y las Melódicas»).
Gabby sacudió la cabeza, pensando que era sorprendente.
—Siéntate a mi lado —le ordenó Stephanie, dando una palmadita en el espacio en la banqueta junto a ella.
Gabby se sentó y de soslayo vio que Travis cogía una gorra de béisbol que tenía guardada en un compartimento de un rincón. La gorra, que ella siempre había considerado que confería un aspecto de bobo a los hombres adultos, le quedaba la mar de bien, con su aspecto desaliñado.
—¿Estáis todos listos? —gritó Travis.
No esperó la respuesta y la barca arrancó con un rugido, surcando suavemente el oleaje. Alcanzaron la ensenada y viraron hacia el sur, para penetrar en las aguas de Back Sound. Las playas de Shackleford Banks asomaban delante de ellos. La hierba se abría paso por encima de las dunas.
Gabby se inclinó hacia Stephanie.
—¿Adónde vamos?
—Seguramente a Cape Lookout. A menos que haya acumulación de barcas, nos dirigiremos a la cala, y luego iremos hasta Onslow Bay. Después tomaremos un refrigerio en la barca, en Shackleford Banks o en Cape Lookout. Eso dependerá de dónde acabemos y de cómo esté todo el mundo de humor. Básicamente dependerá de los niños. Espera un segundo... —Se giró hacia Travis—. ¡Oye, Trav! ¿Me dejas que lleve el timón un rato?
Él alzó la cabeza.
—¿Desde cuándo te han entrado ganas de conducir?
—Desde este mismo instante. Vamos, ya ha pasado un rato desde que salimos del puerto deportivo.
—Más tarde.
—Creo que debería tomar el timón.
—¿Porqué?
Stephanie sacudió la cabeza, como maravillándose de la estupidez de los hombres. Se puso de pie y se quitó la camiseta sin mostrar ni un ápice de timidez.
—Nos vemos luego, ¿vale? Tengo que hablar con el idiota de mi hermano.
Mientras Stephanie se dirigía hacia la parte trasera de la barca, Allison asintió hacia ella. —No dejes que te intimide. Ella y Travis siempre hablan entre ellos de esa forma. —Supongo que están muy unidos.
Escaneado por PRETENDER – Corregido por Isabel Luna
Página 67


































































































   65   66   67   68   69