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128   JACQUES  VALLEE
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 mente,  según  nos  dicen,  a  un  sitio  donde  se  oigan  unos  susu-
 rros  característicos,  o  bien  a  un  túmulo,  o  círculo  de  piedras,  y  versaciones de sobremesa de Lutero, en el que éste  dice al príncipe
 depositar el niño allí. Éste  debe estar acompañado por una  ofren-  de  Anhalt  que  debería  arrojar  al  Moldava  a  cierto  individuo  que,
 da  consistente  en  pan,  mantequilla,  leche,  queso, huevos y carne   en  su  opinión,  es  uno  de  estos  seres cambiados...  o  killcrop,  como
 de  ternera  o  de  gallina.  se  les  llamaba  en  Alemania.
        ¿Qué  se  proponían  las  hadas  con  estos raptos?. La  idea  expues-
 Los  padres  se  retiran  entonces  durante  un  par  de  horas.  Si  ta  por  los  folkloristas  es  también  muy  parecida  a  una  teoría  ac-
 cuando  vuelven  sus  ofrendas  han  desaparecido,  esto  significa  que  tual  sobre  los  OVNIS:  estos  contactos  tenían  una  finalidad  gené-
 les  devolverán  a  su  hijo.  tica.  Según  el  tantas  veces  citado  Hartland,
 Pero  a veces  se han  empleado métodos más  radicales, y  no  po-
 demos  por  menos  de  compadecer  a  los  pobres  niños  que  fueron  el  motivo  asignado  a  las  hadas  en  los  cuentos  del  Norte  es
 maltratados  porque  sus  supersticiosos  progenitores  les  encontra-  el  de  preservar  y  mejorar  su  raza,  por  una  parte  llevándose  a
 ron  cierto  parecido  con  los  elfos.  El  17  de  mayo  de  1884,  o  sea,  a  niños  humanos  para  criarlos  entre  los  elfos  y  unirse  con  ellos,
 finales  del  siglo  pasado,  el  Daily  Telegraph  de  Londres  informó  y,  por  otra,  procurándose  la  leche  y  el  cuidado  de  madres  hu-
 que  dos  mujeres  habían  sido  detenidas  en  Clonmel,  acusadas  de  manas  para  sus  propios  vastagos.
 cometer  actos  de  crueldad  con  un  niño  de  tres  años,  ¡Creían  que
 lo  habían  cambiado  y  que,  por  medio  de  malos  tratos,  consegui-  (Más  adelante  veremos  qué  paralelos  pueden  encontrarse  en
 rían  que  las  hadas  les  devolviesen  el  «verdadero  niño»!  Y  no  hay  recientes  casos  de  OVNIS.)
 duda  de  que  en  tiempos  medievales  la  misma  superstición  aca-  No  obstante,  no  siempre  es  éste  el  propósito  del  rapto,  y  con
 rreó la muerte de criaturas que presentaban taras congénitas. A ve-  frecuencia  los  elfos  devuelven  a  las  personas  secuestradas  des-
 ces  los  mismos  malos  tratos  se  aplicaron  a  adultos  que  se  consi-  pués  de  haberlas  hecho  asistir  únicamente  a  una  danza  o  a  un
 deraban  cambiados.  Hartland  nos  ofrece  un  ejemplo  divertidísimo  juego.  Sin  embargo,  a  menudo  tiene  lugar  un  extraño  fenómeno:
 de  uno  de  estos  casos:  aquellos  que  han  pasado  un  día  en  el  País  de  los  Elfos  han  enve-
      jecido  un  año  o  más  al  regresar  a  este  mundo.
 Un  cuento  procedente  de  Badenoch  se  refiere  a  un  hombre  Éste  es  nuestro  cuarto  punto,  ciertamente  notable.  El  tiempo
 que  descubrió  el  fraude  al  ver  a  su  mujer,  que  era  de  carácter  no  transcurre  allí  lo  mismo  que  aquí.  Y  estos  relatos  nos  ofrecen
 sosegado,  súbitamente  metamorfoseada  en  una  arpía.  Entonces  por  primera  vez  la  idea  de  la  relatividad  del  tiempo.  ¿Cómo  se  les
 preparó  una  gran  hoguera  y  amenazó  con  arrojar  a  ella  a  la  ocurrió  esta  idea  a  los  antiguos  narradores  de  cuentos?  ¿Qué  se
 ocupante  del  lecho,  a  menos  que  ésta  le  dijese  qué  había  sido
 de  su  verdadera  mujer.  Ella  confesó  entonces  que  se  la  habían  la inspiró?  Nadie  es  capaz  de  responder  a  estas  preguntas.  Pero  la
 llevado,  y  que  a  ella  la  habían  nombrado  su  sucesora.  Pero  gra-  verdad  es  que  en  cuentos  procedentes  de  todo  el  planeta  se  en-
 cias  a  su  determinación,  el  marido  consigue  encontrar  a  su  mu-  cuentra  esta  asimetría  del  elemento  temporal  entre  el  país  de  las
 jer  en  una  loma,  cerca  de  Inverness,  frecuentada  por  las  hadas.  hadas  y  nuestro  propio  mundo.
        Al  comentar  este  lapso  de  tiempo  sobrenatural  que  encontra-
 Es  evidente  que  el  mito  de  los  OVNIS  no  ha  alcanzado  toda-  mos  en  el  país  de  las  hadas,  Hartland  relata  la  verdadera  historia
 vía  proporciones  tan  novelescas,  pero  quizá  no  estemos  lejos  de  de  Rhys  y  Llewellyn,  que  sucedió  hacia  1825  en  el  valle  de  Neath,
 ello,  especialmente  en  ciertas  zonas  rurales,  donde  los  extraños  en  el  País  de  Gales.  Rhys  y  Llewellyn  eran  sirvientes  de  un  rico
 objetos  voladores  se  han  convertido  en  un  motivo  de  terror  para  agricultor.  Una  noche,  cuando  regresaban  a  la  casa,  Rhys  dijo  a
 las  personas  que  viajan  de  noche,  y  donde  el  rumor  de  que  los  su  compañero  que  se  detuviese  para  escuchar  la  música.  Llewe-
 «invasores»  puedan  encontrarse  ya  entre  nosotros  ha  llegado  a  llyn  no  oyó  nada.  Pero  Rhys  no  tenía  más  remedio  que  bailar  al
 interesar y  en  algunos  casos  a  convencer  a  las  gentes.  Un  reciente  compás  de  la  melodía  que  había  oído  un  centenar  de  veces.  Rogó
 programa  televisivo  ha  divulgado  este  aspecto  entre  las  masas.  En  a  Llewellyn  que  continuase  solo  con  los  caballos,  diciendo  que  no
 él,  la  especie  humana  está  invadida  por  una  quinta  columna  de  tardaría  en  alcanzarle,  pero  Llewellyn  llegó  a  la  casa  sin  Rhys.  Al
 seres  extraterrestres  que  sólo  difieren de los humanos  en  pequeños  día  siguiente,  sospecharon  que  había  asesinado  a  su  compañero  y
 detalles.  La idea no es nueva, como demuestra la creencia  en niños   lo  encarcelaron.  Pero  un  campesino  «muy enterado  de  los  asuntos
 cambiados por otros. Y existe un pasaje muy conocido en las Con-  de  las  hadas»  adivinó  la verdad.  Reunió  a  varios  hombres  —entre
     ellos  el  narrador  de  esta  historia—  y  condujeron  a  Llewellyn  al
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