Page 361 - LIBRO LA NCHE TRAGICA SANTACRUZ
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La trágica noche de Santacruz                            351



            Como ya dijimos, después de la masacre en el túnel de El Trompillo,
            la Fiscalía Departamental actuó de oficio con la intención de aclarar
            la masacre donde fallecieron nueve personas, la ciudadanía exigía
            respuestas, el esclarecimiento de los hechos. La Fiscalía ordenó a la
            Policía investigar los pormenores que ocasionaron la matanza, en-
            contrar a los culpables y enjuciarlos si era posible. La Policía no en-
            contró al principal culpable e instigador de los hechos, ni a ninguno
            de los cabecillas del bullado caso. La investigación se concentró en
            torno a la figura de Alain Centurión, quien se había ausentado de la
            capital oriental semanas después de la muerte del diputado Euclides
            Santacruz.

            Los investigadores descubrieron que en la capital cruceña se celebró
            una reunión de políticos, quienes estaban involucrados en la masacre,
            en mayo de 1997. Se tenía solamente los nombres de unos cuantos
            líderes políticos, dicha reunión se celebró en el domicilo de Alain
            Centurión.

            Asimismo, las indagaciones llevaron hasta el domicilio de la familia
            Centurión-Sarmiento. Con orden fiscal allanaron el domicilio en la
            calle cerca a la avenida Irala. Descubrieron pasaportes y pasajes pa-
            gados por Centurión para Dominique Fontaine, quien viajó desde
            Oceanía.

            También descubrieron el pago a una inmobiliaria por el alquiler
            de un departamento en el barrio Equipetrol, facturas de una im-
            portadora fantasma por la compra de armas modernas y letales que
            ni se conocían en Bolivia; asimismo, encontraron un pasaporte a
            nombre de Enzo Bordenave. Descubrieron un fax que envió un
            emisario desde Londres con el precio de la tanqueta de industria
            británica Guy  Mark 1, que había sido incautada por la Aduana Na-
            cional en Puerto Suárez. Fue lo más contundente para incriminar
            a “Capablanca”. Otra prueba contra Centurión fue la incautación
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