Page 76 - SANTACRUZ LIBRO

64 La trágica noche de Santacruz

Anastasio Santacruz le dijo a su hijo el día de su partida: “Esta frase la
leí en mis sueños. Yo soñé que estaba más allá de este firmamento, era
una noche solitaria, mágica y silenciosa. Estaba yo contemplando un
cielo que no existía, de pronto cientos de estrellas muy pequeñas se
acercaron al transbordador espacial en el que yo escudriñaba el infinito.
Las estrellas se alejaban y regresaban, era como un juego maravilloso,
se acercaron tanto que yo podía tocarlas con la mano. De pronto estos
pequeños cuerpos luminosos formaron una fila y cada estrella se con-
virtió en letras destellantes con la frase: “El hombre es el arquitecto de
su propio destino”, esa frase que alguien la inventó, hijo, se me quedó
grabada en mi mente, creo que para toda la vida, y creo que algún ser
divino me la envió. Aprende la frase de memoria, debes interpretarla
para que sea tu guía en la vida ya que estudiarás arquitectura. ¿Qué
quiere decir la frase?

“Piensa, reflexiona y sacarás tu propia conclusión”, le dijo.

Su padre no le advirtió a Euclides que algunos valores ya no
valen en esta vida, que muchos están dispuestos a recibir migajas
por traicionar a su mejor amigo, otros subastan sus conciencias,
el amor de tu vida te puede abandonar y marcharse con tu peor
enemigo. Los charlatanes andan sueltos por todos los rincones
del planeta, hay estafadores de toda laya, hay ejércitos de rufia-
nes que hacen el cuento del tío. Es un mundo tenebroso, cruel,
despiadado, se tejen y se destejen maniobras, se tejen historias
inverosímiles para aplastar a los enemigos políticos. Eso es lo
que no sabía Euclides hasta cuando comenzó a ser acosado por
sus enemigos políticos.

Los habitantes de “El Paraíso Escondido” conocían poco de polí-
tica nacional, algunas personas no tenían ni la más remota idea
dónde estaba ubicada la sede de gobierno, nada sabían de las com-
ponendas políticas de los avezados políticos, de las maniobras para