Page 66 - LIBRO BUENO
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Magali García Oliva
Cuando se acercaron las cinco pasé a buscar a Mauricio por la taberna,
iríamos los dos a la cita. Llegamos puntuales a la cafetería, no había mucha
gente, don Francisco, Frank, estaba al fondo esperando.
–Laura querida –dijo sobreactuando.
–Creo que lo de querida sobra ¿no cree? –contesté airada– me parece que
ha sido un error venir.
–No por favor –se adelantó– sentaos, tenemos que hablar. Primero quiero,
necesito disculparme, no sabía que podía pasar algo así. Era sencillo Laura,
sólo tenías que seguir alguna pista y volver, Perfecto desaparecería para
siempre y tú seguías con otros casos.
–Y entonces ahora ¿qué quiere? –pregunté– porque no acepto sus disculpas
y estoy, estamos perdiendo nuestro tiempo.
–Quiero que vuelvas al trabajo, olvida este caso y vuelve por favor –
insistió.
–¿Es usted quien quiere que vuelva o es Perfecto quien le envía a por mí?
–Los dos, Laura –contestó.
–Debe pagarle mucho para que sea usted tan miserable y tan ruin.
– Es lo mejor para todos, Perfecto es un hombre muy importante y está
ámbitos. Hay muchos intereses en juego, vuelve con nosotros.
–Ese tono ¿es una amenaza? –pregunté.
–De momento un ruego, una sugerencia, pero sería peligroso que no
aceptaras.
–¿Puedo pensarlo? –repliqué.
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