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Internacional
(Ottawa) Incluso antes de que Pfizer anunciara el viernes una reducción del 50% en la cantidad de dosis de su va- cuna COVID-19 que se entre- garán a Canadá en las
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próximas semanas para per- mitir la expansión de su planta de producción en Europa, los ministros del gobierno de Tru- deau y los estrategas liberales se dedicaron a innumerables cálculos.
Sus cálculos tienen el mismo objetivo: determinar la mejor fecha para convocar a los vo- tantes a las urnas, en prima- vera o en otoño, para obtener otro mandato, preferiblemente la mayoría.
En sus conjeturas surge una constante. El éxito de la cam- paña nacional de vacunación tendrá una influencia decisiva en el éxito de su campaña
dosis rápidas y suficientes de vacunas aprobadas por Health Canada y luego distri- buirlas a las provincias.
"El despliegue de la vacuna es absolutamente crucial, cru- cial, crucial", dijo esta semana una fuente liberal de alto nivel, refiriéndose a las elecciones federales que se celebrarán próximamente y las posibilida- des de ganar de los liberales.
En privado, un ministro del ga- binete destaca la hercúlea tarea que se avecina en el ho- rizonte para cumplir la pro- mesa del primer ministro Justin Trudeau de garantizar que todos los canadienses
narse para lograr alguna forma de inmunidad colectiva y frenar la propagación del virus, algo esencial para cual- quier recuperación económica sólida. Esto significa aproxi- madamente 27 millones de canadienses. Si Ottawa pro- yecta que tres millones de personas pueden ser inmuni- zadas para fines de marzo, quedarán 24 millones por in- munizar en septiembre.
Concretamente, esto requerirá una operación que funcione bien para vacunar a 130.000 personas todos los días du- rante seis meses desde el 1 de abril hasta finales de sep- tiembre.
"¿Es posible vacunar a 130.000 personas todos los días sin descanso durante seis meses?" ¿Contamos con los recursos humanos sufi- cientes para lograr tal obje- tivo? La vacunación es bastante lenta en este mo- mento ", dijo uno de los libera- les.
Estas cifras explican sin duda la salida prematura de Justin Trudeau hace dos semanas ante el lento inicio de la cam- paña de vacunación en las provincias, ya que la pande- mia sigue creciendo y co- brando víctimas.
Molestos, los primeros minis- tros provinciales desestimaron las críticas, argumentando que Ottawa era el único res- ponsable del suministro de va- cunas y que no tenían suficientes dosis a la mano.
Trudeau admitió la semana pasada que sus críticas no fueron "útiles" durante la úl- tima conferencia telefónica con sus homólogos provincia- les. Pero para garantizar que la mayor cantidad posible de personas se vacunen, ya que los trabajadores de la salud están al borde del agota- miento después de 10 meses de pandemia, el gobierno de Trudeau ha señalado que está listo para movilizar soldados. Empleados de las Fuerzas Ar- madas Canadienses y la Cruz Roja según sea necesario, si las provincias lo desean, para aumentar el ritmo. Comparaciones poco favore- cedoras
Inevitablemente, el gobierno de Trudeau tendrá que lidiar con comparaciones no nece-
Una campaña de vacunación 'crucial' para los
liberales
electoral. Por supuesto, las provincias son las auténticas líderes a la hora de vacunar a la población. El papel de Ot- tawa es negociar con las em- presas farmacéuticas, obtener
que lo deseen puedan ser va- cunados para septiembre.
Calcula que al menos el 70% de la población canadiense (38 millones) deberá vacu-
El Directorio Comercial Latino de Montreal
Edición 909 - Del 21 al 27 de enero del 2021