Page 3 - Revista Nuevos Aires de Bolívar (Nº 21)
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Nuevos Aires
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Contraindicaciones... y otros efectos secundarios
Aunque por momentos el mundo Pero somos románticos y nos la
pareciera detenerse, el tren de la vida bancamos, por eso vamos a conocer
continúa avanzando y así llegamos a una leyenda china al mejor estilo
la estación Primavera. “Romeo y Julieta”, pero con un poco
más de vuelo, ya que se trata de la de
Y ya que llegamos hasta acá, lo me- “Los amantes mariposas”.
jor que podemos hacer es dejarnos
invadir por esta explosión de colores, Sin tanto vuelo poético, nos asoma-
de florecimientos y renaceres. Cada mos al original mundo de Jenna Phi-
uno de los que nos encontramos tra- llips, quien su amor por los perros la
bajando o luchando con nuestras me- llevó a descubrir un negocio polémi-
jores herramientas e intenciones, nos co, original… y sólo para adultos.
merecemos este rebrote de energía, y
por todo eso es que Revista Nuevos El amor también se puede originar
Aires de Bolívar sigue llegando hasta por otras cuestiones no tan humanas,
vos de una manera moderna y solida- y es por eso que para los fierreros de
ria: Con la posibilidad de poder com- corazón, en este número terminamos
partirla, enviarla, mostrarla, regalarla con la 2º parte de la nota sobre el ori-
desde tus redes sociales o vía gen de las marcas y logos de los au-
whatsapp. tos más conocidos.
Se sabe que no perdemos el humor La primavera es una gran estación,
(ni la esperanza) y por eso la tapa de y por eso la recorremos de tal manera
esta primavera 2020 que, a pesar de que vamos a descubrir juntos los
los barbijos y el extraño aire que an- asombrosos misterios que la rodean.
damos respirando, no dejamos de
creer en los mejores escenarios que Y entre tanto romanticismo y aler-
tiene este mundo, y que es el amor. gias, vamos a encontrar literatura pa-
ra disfrutar y reflexionar, el origen de
Y el amor, con todos sus derivados, una frase de connotación sexual, el
comienza siempre por el amor propio. humor con amor de siempre, un nue-
Es por eso que desde la página ante- vo juego de agudeza visual y poco
rior, cortamos una naranja a la mitad parpadeo, y muchas cosas más con las
y descubrimos ese interior que mu- que nos seguimos acompañando des-
chos confunden y no disfrutan por de siempre… y como siempre.
quedarse con su exterior. Gastón Peret