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212                       Dr. William Soto Santiago

               Y en LA TRAYECTORIA DE LA PRIMOGENITURA
            hemos visto  el heredero,  el hijo  de  la libre,  el hijo  de la
            Jerusalén celestial, que es la libre; por lo tanto el hijo de la
            libre es libre también.
               El hijo de la libre es el heredero con Cristo y coheredero
            con  Cristo  de  todo  lo  que  está  en la primogenitura;  por
            consiguiente, Cristo toma el Título de Propiedad, el Libro
            de  los Sellos, que contiene la Primogenitura, lo abre y lo
            trae a la Tierra a Su Iglesia, porque ella es la coheredera
            con Cristo de esa Primogenitura; por lo tanto le tocan todas
            las Bendiciones de la Primogenitura: las bendiciones de los
            Cielos  y  las  bendiciones  también  de  la  Tierra.  Por  eso
            cuando Jacob bendijo a José, lo bendijo con bendiciones de
            la Tierra y bendiciones del Cielo también.
               Ahora,  podemos  ver  que  en  la  Bendición  de  la
            Primogenitura siempre hay una bendición doble.
               Vean, José teniendo la Bendición de la Primogenitura,
            vamos a ver en Primera de Crónicas, capítulo 5, dice:
                “Los hijos de Rubén primogénito de Israel (porque él
            era el primogénito,  mas como violó el lecho de su padre,
            sus derechos de primogenitura fueron dados a los hijos de
            José, hijo de Israel, y no fue contado por primogénito)...”.
               A  los  hijos  de  José  fue  dada  la  Bendición  de  la
            Primogenitura, por lo tanto, José recibe la Bendición de la
            Primogenitura,  la cual pasa a sus  hijos.  Y por eso  José,
            vean ustedes, es el primogénito de Jacob.
               ¿Y cómo va a ser el primogénito de Jacob, José, cuando
            José vino  a nacer cuando  ya habían nacido todos  o  casi
            todos los hijos de Jacob? Rubén era el primogénito de Dios
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