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y Vida

LA LECTURA ES CLAVE EN EL APRENDIZAJE

¿Dejar de leer a los 15 años?

hay formas de evitarlo

El Paiz de Tarija realiza con ellos, y estas les ocupan tura fue una mala idea”, prosigue el
Los datos de tiempo de lectura una gran cantidad de su tiempo. Por experto, para quien la literatura se
en Europa no mienten y aunque el contrario, en casa se vuelven ha convertido en “una nota a pie de
son esperanzadores hasta los 14 más reservados y, a veces, rehúyen página del temario que muchos
años, las cifras caen en picado a momentos en familia, como podría alumnos se limitan a estudiar de
partir de los 15. En Bolivia se lee al ser la lectura”, argumenta Salas, memoria”. Para Salas, no hay
año entre 11 a 3 libros por persona que también apunta a la mayor exi- tiempo apenas para leer, para co-
y según el Barómetro de Hábitos de gencia académica que hace que los mentar con los alumnos las lectu-
Lectura y Compra de Libros en Es- chavales lleguen cansados a casa ras, para exprimirlas en el aula: “En
paña 2022, del Ministerio de Cultura y tiendan más a buscar un ocio fácil todos los centros debería existir un
y Deporte, el 78,2% de los niños y y que no les exija demasiada con- buen plan lector en el que los pro-
niñas de entre 10 y 14 años leen en centración. fesores lean a los alumnos en voz
su tiempo libre de forma frecuente. Y ahí, claro, entran en juego las alta, tanto obras completas (cuen-
Estas ratios descienden más de 10 pantallas. Aunque según los datos tos, poemas, novelas) como frag-
puntos en la franja de edad entre del barómetro de hábitos de lectura, mentos bien contextualizados de
los 15 y los 18 años (67,7%) y si- entre los 15 y los 18 años el número los clásicos a los que los estudian-
guen en caída libre entre los 18 y de lectores frecuentes y ocasiona- tes difícilmente podrían acceder por
los 24. “En cuestión de 10 años — les se ha incrementado en casi 12 sí mismos”. Y añade: “Con un buen
los que van de la preadolescencia a puntos desde 2018, para el experto trabajo previo del docente, La Ce-
la edad adulta— perdemos un 25% los móviles (y las pantallas en su lestina, El libro del buen amor o El
de lectores frecuentes y ganamos conjunto) influyen en que los jóve- Quijote se pueden leer en clase, y
un 21% de no lectores”, lamenta Mi- nes dejen de leer de una manera conseguir que los alumnos disfruten
guel Salas Díaz (Madrid, 46 años), definitiva y evidente: “Es mucho y relacionen dichas obras con su
doctor en Teoría de la Literatura y más difícil llegar al libro desde que propia experiencia vital”.
Literatura Comparada, que acaba los smartphones nos ofrecen dece-
de publicar (En) plan lector: sobre- nas de posibilidades de ocio fácil, La importancia del ejemplo aficionados al cine”, argumenta el
vivir a la adolescencia sin dejar de que no exige esfuerzo. La lectura, ¿Cómo salvar esos escollos y experto, que no obstante reconoce
leer (Plataforma Actual). La pre- en cambio, sí que exige esfuerzo, conseguir que los adolescentes se que no existe una fórmula mágica
gunta evidente es qué pasa en la serenidad y silencio, así que pierde centren en la lectura? Para Salas la que consiga que los hijos lean con
adolescencia, qué factores entran la batalla. ¿No nos pasa lo mismo a respuesta está clara: mediante el frecuencia. “De hecho, hay hogares
en juego en esta etapa vital, para los adultos? Creo que casi todos ejemplo. “Tenemos que mostrarles con padres muy lectores en los que
que se produzca semejante bajón leemos menos y miramos más el que hemos de elegir de manera los niños no se enganchan a los li-
en las cifras de lectores frecuentes. móvil que hace 10 años”. pausada nuestras actividades de bros. En estos casos los progenito-
“La adolescencia es una edad A todos estos condicionantes, ocio; que, a pesar de la demagogia res no deben culparse ni
muy difícil. En ese momento todo se para Salas se unen otros de índole imperante, hay actividades mejores presionarlos. Los hábitos de lectura
pone en cuestión y la propia identi- más académico, entre ellos el que otras, que nos dan más, que en la infancia y adolescencia son a
dad entra en crisis. El joven se hecho de que Lengua y Literatura nos enriquecen y nos forman”, sos- veces muy cambiantes, no hay que
suele volcar en su grupo de amigos aparezcan juntas en el currículo tiene. El también sostiene que es perder la esperanza. En última ins-
y da prioridad a las actividades que académico. “Unir Lengua y Litera- importante hacer comprender a tancia, la lectura no es obligatoria
niños y niñas que desarrollar la vo- para ser una buena persona, tener
luntad y la capacidad de concentra- una vida plena o ser feliz”, añade.
ción es fundamental, porque sin En todo caso, Salas destaca la
ellas “vivirán siempre condenados a importancia de que haya libros en
una superficialidad que tiene conse- casa, de que la lectura esté pre-
cuencias graves, ya que, entre sente en la conversación diaria
otras cosas, nos hace mucho más igual que lo están las series o lo que
manipulables”. ha sucedido en el colegio o en el
En ese sentido de ser ejemplo, el trabajo: “Preguntar a los hijos por lo
autor lanza al aire en las páginas de que están leyendo, que se les re-
su libro una pregunta que da mucho gale libros, que se hagan visitas a
que pensar: ¿Qué hacemos delante librerías y bibliotecas con frecuen-
de los niños? Muchas veces, segu- cia. También la necesidad de leerles
ramente más de las necesarias, los y leer con ellos, un hábito muy ins-
progenitores caen en la tentación taurado en la primera infancia, pero
de usar mucho las pantallas: “Los que luego se va perdiendo con-
niños aprenden por imitación, es así forme los niños aprenden a leer y
cómo se adaptan al entorno. Por empiezan a llevar a cabo esta acti-
eso en casa de padres deportistas, vidad en solitario”.
o aficionados al cine, es mucho más “A mis alumnos les gusta mucho
fácil encontrar hijos deportistas o que les lea en clase”, incide el ex-