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El dilema latinoamericano ante la inteligencia

artificial: ¿adaptarse o diseñar el futuro?

América Latina enfrenta una encrucijada histórica: adaptarse a una inteligencia artificial
diseñada por otros o crear su propio futuro tecnológico con justicia y soberanía digital.

n el umbral de una nueva era tecnológica, América Latina definir políticas nacionales de inteligencia artificial con enfoque
observa con cierta mezcla de esperanza y temor el avance social, no meramente productivo. La IA no puede ser solo un tema
de la inteligencia artificial. En los discursos oficiales y los José Luis Sampietro Saquicela de innovación empresarial, debe incluir estrategias de capacita-
Eforos empresariales se repite con entusiasmo que la región ción masiva, conectividad inclusiva, educación tecnológica y regu-
debe subirse al tren de la innovación, pero en las calles, en los talle- lación ética. Sin una alfabetización digital amplia, la mayoría de la
res y en las aulas, la pregunta es otra: ¿quién diseña realmente el población quedará atrapada entre la fascinación y el miedo.
futuro de nuestros empleos? con los trabajadores desplazados. En otras palabras, hablamos La infraestructura digital sigue siendo el gran cuello de botella,
Si algo enseña la historia latinoamericana es que las revolucio- mucho de innovación, pero poco de evolución tecnológica. El riesgo pues no existe inclusión sin acceso, y sin acceso no hay equidad.
nes tecnológicas, cuando llegan sin política y sin equidad, suelen de una dependencia digital se cierne sobre América Latina: así Las inversiones en fibra óptica, 5G y redes satelitales deberían
ampliar la distancia entre quienes deciden y quienes obedecen. como en el siglo XX la región dependió de la importación de maqui- considerarse tan estratégicas como las obras viales o energéticas.
Los datos recientes de la Organización Internacional del Trabajo naria industrial o de tecnología militar, hoy podría quedar atrapada Del mismo modo, la educación necesita una revolución de conteni-
son elocuentes. Entre un 26% y un 38% de los trabajos en América en la importación de algoritmos. Consumimos plataformas que no do, orientada a formar a las nuevas generaciones en pensamiento
Latina y el Caribe podrían verse afectados por la irrupción de la reflejan nuestras lenguas, nuestros valores, ni nuestras realidades. algorítmico, ética de datos y creatividad digital, no solo en el uso
inteligencia artificial generativa. De ese universo, entre un 8% y Si no desarrollamos modelos propios, la inteligencia artificial termi- instrumental de la tecnología. Los países más pequeños, como
un 14% experimentaría mejoras de productividad gracias al uso de nará siendo una nueva forma de colonialismo, una en la que no se Ecuador o Uruguay, pueden encontrar en esta transición una
herramientas de automatización y análisis, mientras que entre un dominan territorios, sino datos. ventaja comparativa si apuestan por políticas ágiles y alianzas con
2% y un 5% corre el riesgo de desaparecer por completo. Detrás de Se deben promover más iniciativas, como cuando, por ejemplo, universidades, startups y gobiernos locales. Ecuador, por ejemplo,
esos porcentajes hay personas reales: trabajadores administrati- en junio de 2025, varios países latinoamericanos lanzaron una podría impulsar una estrategia de IA aplicada a sus desafíos
vos, técnicos, vendedores, docentes o profesionales independientes. iniciativa conjunta para desarrollar un modelo de lenguaje regional, estructurales, como lo es la gestión del agua, agricultura sostenible,
La inteligencia artificial reconfigura silenciosamente las tareas, Latam-GPT, destinado a incorporar expresiones, acentos y contex- prevención de desastres o educación rural. Si el país logra vincular
las jerarquías y las oportunidades. Y en una región marcada por tos propios del español y del portugués latinoamericanos. No se tecnología con propósito social, podría posicionarse como un refe-
desigualdades estructurales, el impacto no será uniforme. Mien- trata solo de una cuestión lingüística, sino cultural y política, y una rente regional en innovación inclusiva.
tras las grandes empresas urbanas pueden invertir en capacitación, oportunidad de incentivar la posibilidad de que nuestros algoritmos El componente ético es igualmente urgente. Los ciudadanos
conectividad y transformación digital, millones de trabajadores aprendan de nosotros y no únicamente de bases de datos foráneas. tienen derecho a saber cuándo una decisión pública ha sido
informales, jóvenes sin acceso a educación técnica o comunidades Si esta experiencia prospera, podría marcar el inicio de una sobe- mediada por un algoritmo, cómo se usan sus datos y qué sesgos
rurales sin conexión estable quedan fuera del mapa del progreso. El ranía tecnológica regional, algo que América Latina no ha tenido existen en los modelos que afectan su vida. La transparencia
Banco Mundial calcula que entre un 30% y un 40% de los empleos desde hace décadas. Pero más allá de la innovación, el debate algorítmica y las auditorías independientes deberían formar
en la región están expuestos a los efectos de la IA, y que hasta dieci- crucial sigue siendo social. En una economía donde casi la mitad del parte de la agenda democrática. La inteligencia artificial no debe
siete millones de trabajadores podrían no beneficiarse de ella por empleo es informal, la automatización puede resultar devastadora reemplazar la política, sino mejorarla. Por estas razones, el gran
falta de infraestructura digital o competencias adecuadas. si no se acompaña de políticas activas. Los sectores más vulnerables reto latinoamericano no está en aprender a usar la inteligencia
La paradoja es que, en un continente que exporta talento, la gran como los servicios administrativos, comercio minorista, atención al artificial, sino en decidir qué queremos hacer con ella. Si permiti-
mayoría de su población sigue siendo usuaria pasiva de tecnologías cliente, logística, están entre los más expuestos. mos que la innovación avance sin dirección, corremos el riesgo de
diseñadas y gobernadas por otras regiones. El dilema entonces no En muchos casos, la inteligencia artificial reemplaza tareas, no profundizar nuestras desigualdades, pero si la transformamos
es solo económico o laboral, sino político. ¿Quién define las reglas personas completas, pero la fragmentación laboral puede erosio- en una herramienta de desarrollo humano, podríamos estar ante
del juego en esta nueva revolución industrial? Las corporaciones nar la estabilidad de millones de hogares. Sin redes de protección, una oportunidad histórica hacia el salto productivo y educativo.
tecnológicas que desarrollan los modelos de lenguaje y controlan reconversión profesional o apoyo al emprendimiento, los despla- En esta disyuntiva, el papel de las universidades, los científi-
los datos ya marcan el ritmo del cambio, pero los Estados, las zados tecnológicos quedarán condenados a la precariedad. La otra cos y los pensadores públicos será decisivo. Necesitamos voces
universidades y las comunidades locales parecen correr detrás, cara del problema son los trabajadores invisibles detrás de la inteli- que conecten la tecnología con la ética, la productividad con la
intentando entender un fenómeno que avanza más rápido que las gencia artificial, es decir aquellos que etiquetan, corrigen o validan justicia, la innovación con la empatía. El futuro del trabajo no
leyes y los presupuestos. datos desde América Latina para alimentar los modelos globales. puede diseñarse desde laboratorios desconectados de la realidad
En los países más avanzados de la región, como Chile, Brasil o Talentos venezolanos, argentinos, ecuatorianos, brasileños, social. La inteligencia artificial nos confronta con una pregun-
México, ya se han impulsado estrategias nacionales de inteligencia entre otros, realizan ese trabajo remoto y precario por sueldos ta moral y política: ¿queremos una tecnología que nos sustitu-
artificial. Sin embargo, pocas incluyen mecanismos reales de gober- mínimos. Es la paradoja de una región que, mientras discute sobre el ya o una que nos complemente? La respuesta dependerá de si
nanza o participación ciudadana. Las políticas suelen centrarse en futuro del trabajo, ya sostiene parte de la economía digital mundial América Latina decide ser autora o simple espectadora de su
promover la adopción tecnológica sin preguntarse quién controla en condiciones del siglo XIX. Si América Latina quiere transformar propio futuro.
los algoritmos, cómo se protegen los datos personales o qué ocurre esta crisis en oportunidad, debe actuar ahora. El primer paso es Publicado originalmente en Latinoamèrica21.

DATA DE LA HISTORIA
Día de Visibilidad del Síndrome de Sudeck

Cada primer lunes de noviembre se celebra en Simpática Refleja (RSD), Algodistrofia o Síndro-
todo el mundo el Día de Visibilidad del Síndro- me de Sudeck, es una patología multisintomáti-
me de Sudeck o Síndrome de Dolor Regional ca y multisistémica, caracterizada por un dolor
Complejo, con la finalidad de concienciar y sensi- fuerte e incapacitante en las extremidades o en
bilizar a la población acerca de esta enfermedad cualquier parte del cuerpo.
crónica que afecta a miles de personas en todo Es un trastorno neurológico que se genera debido
el mundo. a una reacción errónea del organismo ante trau-
¿Qué es el Síndrome de Sudeck? matismos, cirugías, fracturas, inmovilizaciones,
El Síndrome del Dolor Regional Complejo entre otros. Afecta al sistema nervioso simpático,
(CRPS), igualmente conocido como Distrofia caracterizado por los siguientes síntomas: