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LOS ARTÍCULOS PUBLICADOS EN ESTA SECCIÓN DE OPINION
/ANÁLISIS SON RESPONSABILIDAD ÚNICA DE LOS AUTORES.
Lo que el estado debe garantizar (y lo que no)
Una guía para escuchar con criterio antes de votar
ada cuatro años, Honduras entra en temporada de corrupción, abuso de poder o asociación ilícita no representa
milagros. No llueven peces, pero llueven candidatu- renovación: representa continuidad.
ras: de pronto el bosque político se llena de nombres Por: Luis J. Pinto El liderazgo debería surgir —preferiblemente— de perso-
Cque hasta ayer nadie conocíamos, proclamándose nas que no hayan vivido toda su vida del Estado. Porque quien
—según ellos mismos— salvadores de la patria. Pero quien crece dentro de él aprende sus vicios, hereda lealtades ajenas
observa con calma entiende que, en ese desfile, rara vez y carga compromisos que no pertenecen al ciudadano, sino al
aparece lo mejor del país. Las excepciones existen, sí, pero propiedad, libertad, justicia, movilidad, trabajo. Nada funcio- sistema. El “político de carrera” es, en esencia, un burócra-
suelen mantenerse en su vida privada, convencidas de que na cuando el miedo gobierna. ta del poder: experto en sobrevivir, incapaz de producir algo
la política es un lodazal donde la decencia no dura limpia ni En Honduras, esa verdad se expresa en un gesto cotidiano: valioso fuera del aparato estatal.
un día. la gente no pide prosperidad, pide sobrevivir mientras intenta Por eso, antes de creer en promesas, la pregunta esencial
Lo que abunda no son líderes, sino criaturas de ocasión. prosperar. El ciudadano sólo quiere llegar a casa sin ser asal- es otra:
Está el devoto que sustituye ideas con fervor; el fracasado que tado; el empresario, abrir un negocio sin ser extorsionado. ¿hará cumplir la ley incluso cuando no le convenga?
cree que el poder le dará el propósito que nunca encontró; el La pregunta que desnuda a un candidato Y más aún: ¿tendrá que aplicarla contra sí mismo?
técnico verboso pero ausente; el resentido que quiere ajustar En tiempos de ruido político, hay una pregunta simple que Lo que sí debe garantizar el Estado
cuentas con el mundo; el soberbio que confunde certeza con revela más que cualquier discurso: Tras seguridad y justicia, queda la tercera función irrenun-
sabiduría; el oportunista que llega “a ver qué sale”; y el relleno, “¿Los delincuentes son víctimas o victimarios?” ciable: proveer los servicios públicos esenciales que hacen
ese personaje manso que está ahí porque alguien lo puso y no La respuesta no mide ideología: mide carácter. posible la vida en común. Ni más, ni menos.
tuvo el valor de decir que no. Quien responde “víctimas” suele explicar el crimen como Educación, salud, infraestructura y energía no son favores:
En otras sociedades, la política puede ser un servicio. Aquí, consecuencia inevitable de la pobreza, la marginación o la son pilares de ciudadanía. La empresa privada puede partici-
demasiadas veces, es una oportunidad laboral. Y mientras falta de oportunidades —todas reales, pero ninguna excusa par, pero jamás llegará a donde no hay rentabilidad. Ningún
ellos reparten promesas, nosotros —los ciudadanos— repeti- para quitar una vida o destruirla—. Bajo esa mirada, el empresario abrirá una escuela en una aldea remota ni cons-
mos un error elemental: pedirle al Estado lo que no puede dar agresor se vuelve paciente y el ciudadano termina siendo truirá un hospital en una montaña aislada. Esa obligación es
y dejar de exigirle lo que sí debe garantizar. culpable por vivir en un país desigual. Esa narrativa niega la del Estado porque solo él tiene el deber moral de garantizar un
Por eso, antes de escuchar al próximo candidato, conviene responsabilidad individual: si todo es entorno, entonces nadie piso mínimo de dignidad.
bajar el volumen de la propaganda y recordar lo esencial: el elige; y si nadie elige, nadie responde. Pero acceso no significa control. La educación debe ser libre,
Estado no existe para consentirnos, sino para asegurar convi- Es el sueño del político mediocre: un pueblo que se cree plural y exigente, no un monopolio del Estado ni un privile-
vencia, justicia y libertad. Si un aspirante no puede explicar víctima de todo, excepto de sí mismo. De ahí el discurso cómodo gio del mercado. El aula es el único lugar donde todos somos
cómo garantizará esos tres pilares —y sólo esos—, no busca de algunas ONG y organismos internacionales: la violencia iguales, donde el mérito debería definir quiénes somos y qué
servir: busca empleo. entendida como fenómeno abstracto, no como decisión concre- podemos llegar a ser.
La seguridad: el fundamento del poder ta. Pero la violencia no se estudia para disecarla; se enfrenta Una educación justa premia el esfuerzo, exige resultados y
Hablemos claro: el deber primario del Estado no es educar, para detenerla. Quien no entiende eso puede escribir tratados, rechaza la obediencia ideológica. La calidad nace de la liber-
ni subsidiar, ni inspirar. Es proteger. pero jamás resolver un crimen. tad y de la diversidad de modelos educativos: públicos, priva-
La seguridad es la base del contrato social: renunciamos Quien responde “victimarios”, en cambio, reconoce que la dos y comunitarios.
a ejercer la violencia por cuenta propia para que una autori- justicia empieza por llamar las cosas por su nombre. Que la Una sociedad verdaderamente educada es aquella donde el
dad común la regule. Hobbes lo dijo con solemnidad. Bukele compasión no puede justificar la impunidad. Y que un Estado origen no determina las oportunidades y donde aprender no
lo sintetizó con crudeza: “El Estado tiene el monopolio de la que perdona por sistema no pacifica: educa al crimen en depende del lugar de nacimiento, sino de la voluntad de crecer.
violencia.” La diferencia está en cómo se usa ese poder: para confianza. El orden de las prioridades
proteger o para someter. Pero su ausencia —en cualquier Ley, arbitraje y mérito Todo esto conduce a una verdad simple, pero olvidada: el
caso— abre la puerta a la barbarie. A partir de esa premisa nace el segundo deber del Estado: Estado tiene un orden de obligaciones y los ciudadanos, un
Un gobierno que no enfrenta al crimen organizado no es hacer cumplir la ley. orden de exigencias.
débil: es cómplice. Cuando las pandillas controlan barrios, las Friedman decía que el gobierno debe ser árbitro, no jugador. Primero, seguridad. Luego, justicia. Después, servicios
maras cobran impuestos y los carteles financian campañas, el El árbitro no mete goles, no elige equipos, no se aplaude a sí esenciales. Todo lo demás —discursos, subsidios, propagan-
Estado no ha perdido el poder: lo ha cedido. Hay zonas donde mismo: asegura que las reglas existan y se cumplan. Cuando da— es ruido.
la policía no entra, la ley no rige y el Estado sólo existe en los el Estado olvida ese papel, la justicia se vuelve espectáculo o Porque un país puede sobrevivir con carencias, desigualdad
mapas. Eso no es una falla administrativa: es una abdicación negocio. o gobiernos mediocres. Pero ningún país sobrevive cuando
del poder soberano. Un país justo no necesita más cárceles, sino reglas claras fracasa lo único que el Estado debe garantizar: que podamos
Milton Friedman lo resumió sin adornos: “La primera aplicadas siempre. Y para eso, quienes aspiran a gobernar vivir sin miedo.
función del gobierno es proteger a sus ciudadanos de la coer- deben estar libres de sombras legales. Nadie puede hablar Ese es el punto de partida de cualquier democracia. Y
ción y la violencia.” de justicia si ha vivido del tráfico de influencias, del dinero debería ser, también, el punto de partida de nuestro voto.
Sin seguridad, todos los demás derechos son ilusiones: público o del favor político. El candidato investigado por
DATA DE LA HISTORIA
Día Internacional contra el cáncer
neuroendocrino (NET)
Cada año se celebra el Día Internacional Síntomas, diagnóstico y tratamiento del
contra el Cáncer Neuroendocrino (NET) el cáncer neuroendocrino
10 de noviembre,con la finalidad de dar visi- El cáncer neuroendocrino, igualmente conocido
bilidad a los pacientes y a sus familiares que como tumor NET, es una enfermedad caracteri-
padecen de algún tipo de tumor neuroendo- zada por la aparición de tumores generalmente
crino, así como concienciar a la población en carcinoides y poco frecuentes, que se desarro-
general y al gremio médico y sanitario acerca llan lentamente en diversos órganos: pulmones,
de la importancia del diagnóstico precoz de estómago, apéndice, intestino delgado, colon,
esta enfermedad. hígado, recto y páncreas.

