Page 11 - 1PAGES P. AGUADAS

Pero lo mas importante, lo que mas debes entender y jamas olvidar es que tú, y sólo tú, puedes cambiar tu vida; nadie lo puede hacer por ti. Te darás cuenta, con el tiempo, que cada pequeño logro que logres, te hará crecer como persona, cada detalle y paso por mínimo que sea permitirá la sumatoria que permitirá lograr el cambio y éxito que quieres para ti.
Y hoy quiero darte un regalo en una frase:
“Si quieres llegar a donde la mayoría no llega, debes hacer lo que la mayoría no hace”
Diariamente, en los diferentes entornos en que participo, encuentro de manera repetitiva actitudes o expresiones de personas que asumen y se enfocan en sufrir, de manera permanente, problemas, dificultades y tragedias. Y si te detienes a revisarlo, todos tenemos estas situaciones en mayor o menor cantidad e intensidad presentes a través de nuestras vidas. Así, durante ellas, vamos solucionando uno tras otro, muchos de nuestros problemas. Pero no falta la ocasión cuando de pronto aparece alguno que nos tambalea de mas; surge una de aquellas situaciones que, asumimos, creemos, o nos hacen pensar, que no la podemos solucionar; la vemos como un gran obstáculo imposible de encarar. Es el difícil momento de nuestro proceso, proyecto o meta, en que nos es casi imposible encontrar la manera de enfrentarlo, manejarlo o sobrepasarlo.
Allí es cuando el cansancio, el desgaste o la falta de experiencia, nos impiden tomar el suficiente espacio, la distancia necesaria, la tranquilidad requerida y la energía indispensable para resolverlo.
Este momento; este estado nefasto para triunfar sobre la situación, tiene que ver, no con el problema como tal, sino con la naturaleza de la persona que lo vive. Con uno mismo.
Y surgen varias posibilidades, varios tipos de naturaleza para responder a ese monstruo.
Yo veo constantemente individuos cargados de problemas; individuos con la cara marcada por la tristeza, tensión o ansiedad, que esperan el fin de semana para ahogarse en el alcohol y así olvidar, escapar de la situación que están viviendo. O ignorarla, y así evitar enfrentarla; peor aún para ellos.
Otros, más fuertes, resisten sin hablar de ello mucho, y al contrario, se colocan una máscara fingiendo que todo está bien; muchas veces, con la esperanza que otros les resuelvan lo que les esta sucediendo. Peor aún, a
11