Page 333 - La introduccion de la Segunda Venida de Cristo a Su Iglesia.indb
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La Visión de La Carpa   327

               LEVANTÁNDOLO DE LA HISTORIA
               1 de octubre de 1958 [58-1001]
               Jeffersonville, Indiana, Estados Unidos
               Rev. William Marrion Branham
                   [Párrs. 4, 5, 7, 8 y 9 incluidos en Citas, pág. 25, párr. 211]
                   4  Y me ha sido dicho, hace algún tiempo, por una visión que el Señor me dio, hace un año,
               supongo, o tal vez un poco más. Lo tengo escrito en un libro en casa, de un cambio de un
               ministerio. Y muchos de ustedes que están aquí… no diría que muchos. Pero recuerdan cuando
               construimos por primera vez este tabernáculo, recuerdan la visión que vino la mañana que
               pusimos la piedra angular allí, cuando Él dijo: “Este no es su tabernáculo”. Pero Él me sentó
               bajo los cielos y me dijo, me dijo que las diferentes cosas tendrían lugar. Si ustedes saben,
               observarán que eso sucedió exactamente como fue dicho. ¿Ven? Y siempre ha sido así. Así
               que, por lo tanto, tengo la seguridad de que lo que Él dice, es Dios, y tiene que ser verdad.
                   5  Y entonces hace algún tiempo, estaba en una visión y vi una Gran Carpa. Oh, era un
               asunto inmenso y gigantesco. Y había apenas acabado de hablar, y muchas almas estaban en el
               altar, y estaban llorando con sus manos alzadas quietamente y suavemente. Un buen hombre
               de habla suave salió a la plataforma, y dijo: “Ahora formen una línea de oración mientras el
               hermano Branham se alista”. Al estar parado de este modo, la línea de oración quedaría a mi
               izquierda. Y me fijé en un grupo de gente que parecía que cubrían una cuadra de la ciudad o
               más, que estaban parados en línea. Había un pequeño edificio, edificio de madera, dentro de
               esa carpa. Y allí había una mujer, parada allí o un hombre, tomando nombres. Y la gente iba
               entrando en muletas y camillas, y saliendo al otro lado caminando. Y yo me preguntaba qué
               era lo que ocurría allí dentro. Y entonces ese Ángel del Señor del cual ven ustedes ven su
               fotografía aquí, se fue de mí, y fue sobre ese pequeño edificio, y se paró allí, y fue hacia abajo.
               Y una voz habló, y dijo: “Yo te encontraré en ese lugar”. Pues, ahora, yo he estado esperando
               por ese tiempo.
                   6  He estado fuera, algún tiempo ahora, descansando, debido al exceso de trabajo. Y he
               regresado.
                   7  Y el último fin de semana, tuvimos una pequeña, una especie de doctrina de la iglesia
               durante tres noches aquí. Eso es, el sábado por la noche, el domingo por la mañana, y el
               domingo por la noche, antes de esta reunión. Como para poner la iglesia en condiciones, para
               que pudiéramos seguir adelante con esta reunión que viene ahora. E inmediatamente después
               de esto, el domingo por la noche será mi noche de despedida del tabernáculo por algún tiempo,
               hasta donde yo sé. Y ahora…
                   8  Y estoy esperando y confiando en Dios, que en algún momento durante esta semana, yo
               quiero usar este pequeño cuarto de aquí para un cuarto de oración. Y para llevar a los enfermos
               y afligidos, y ver si Él me encuentra, y comenzar en el tabernáculo de nuevo en el nuevo
               ministerio. De seguro yo amaría verlo hecho. No sé lo que es, mis amigos. No tengo ninguna
               idea de lo que será. Pero Aquel que escucha ahora, confío en que será algo mayor para ayudar
               a Sus pobres, enfermos y sufridos hijos de este día. Le prometo que seré fiel y leal, y trataré
               de ser más leal de lo que fui con los otros dones que Él ha dado. Y si llega a suceder, será tan
               real como lo han sido los otros. Ahora esos otros dones son todavía tan firmes como lo fueron.
               ¿Ven? Pero estoy esperando que algo nuevo suceda ahora, y espero que tenga lugar aquí.
               Ahora, pensé, tal vez esta noche hablaríamos y veríamos cómo me sentía.
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