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La Segunda Venida de CriSto     43

               incluso de tal manera que haría que la gente no comprara o vendiera… a menos que hubieran
               recibido esto: la marca de la bestia, que es el romanismo; y la imagen de la bestia, que es el
               protestantismo. Que la imagen… La bestia tenía poder, autoridad, para dar vida a la imagen,
               para hablar, y lo hizo. Y eso es la Confederación de Iglesias, cuando se confederan juntos.
                   17  Ahora hay muchos jóvenes aquí. Yo no lo sé, Jesús puede venir esta tarde. Él puede venir
               el próximo año. Yo no sé cuándo Él vendrá. Pero si el… recuerden, si yo no vivo para ver ese
               Día de Su Venida… Lo cual, yo espero que sí, y de alguna manera creo que sí. Ahora, si no lo
               veo, no dejen que esta Palabra se aparte de sus oídos y de su corazón. ¿Ven? Sólo recuerden
               que yo hablo en el Nombre del Señor.
                   18  Ahora, creo con todo mi corazón, que esa es la forma en que va a terminar. Habrá como
               una unión, un–un boicot. Todos los lugares como este serán cerrados. Y usted no podrá hablar
               a menos que tenga un permiso o una licencia de esta Federación de Iglesias, para celebrar un
               servicio. Está casi… Esto es lo que hace ahora, incluso en la denominación. Muestra dónde
               está. Sí, señor. Hay que tenerla. Y ahí es donde terminará. Esa es mi predicción, como siervo
               de Cristo, a través del entendimiento que tengo de la Palabra, y la inspiración. Ahí es donde
               vendrá. Todas las señales apuntan al final. Acabo de hablar sobre eso.
                   (…)  326  Dios  está tomando los elegidos fuera de esa iglesia pentecostal  (esa híbrida),
               sacándolos fuera, y finalizando con la Palabra. Y tiene que estar tan cerca hasta que la Palabra
               misma se unirá con esta Palabra. Ahí viene la Piedra de Cabecera, clamando: “Gracia, gracia,
               sublime gracia”. ¡La Piedra de Cabecera!
                   327  Aquí  está,  así,  vean,  ahí.  ¿Ven  cómo  se  ensancha  aquí  abajo?  Y  se  va  acercando,
               acercando,  acercando,  el ministerio.  Después de un tiempo,  aquí viene…  Aquí está
               Lutero: justificación, justificado. Aquí viene Wesley: un grupo santificado. Aquí vienen los
               pentecostales: restauración de los dones. Ahora Dios está tomando de allí, perfeccionando un
               grupo, para hacer un ministerio exactamente como esa Palabra allí, porque tiene que encajar
               con la Palabra.
                   (…)  334  Ahora bien, el Cuerpo lleva a cabo las obras, continúa las obras y hace las obras que
               la Cabeza le ordena. ¡Ja, ja, ja!
                   335  Díganme dónde dijo Él alguna vez: “Organicen”. Díganme dónde la Cabeza dijo alguna
               vez: “Está bien que las mujeres se corten el pelo”. ¿Eh? Menciónelo. No está ahí. Díganme
               dónde la Cabeza dijo alguna vez: “Estas obras que yo hago, ustedes no las harán”. Díganme
               eso.
                   336  Pero la Cabeza dijo esto. Si ustedes quieren anotar la Escritura, se la daré. Juan 14:12:
               “Las obras que yo hago también las haréis vosotros”, eso es Su Cuerpo. ¿Ven?
                   337  ¿Ven ahora por qué he sido tan celoso del tipo de Semilla que he plantado para el
               Cuerpo? La lluvia va a caer muy pronto ahora; quiero decir, la verdadera lluvia. Y tiene que
               tener Semilla para caer. Espero vivir para verlo. ¿Entienden ahora? [La congregación dice:
               “Amén” –Ed.] Será la Palabra viviente, como era al principio, la Palabra hablada de Dios;
               teniendo Su poder, porque está en Él, en Su propio Cuerpo, obrando en Su propia manera.
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                   (…)    Voy a leer un poco ahora. Sólo… quiero que escuchen bien esto. Aquí es donde el
               Espíritu dijo: “Toma la pluma”. Tendría que dejar ir algo de eso, pero tengo que traer algo de
               eso a ustedes. Muy bien. [El hermano Branham lee los párrafos 414 a 441–Ed.]
                   414  Ahora, aquí está lo que estoy tratando de decirles. La ley de reproducción produce
               conforme a su género (Génesis 1:11). Estos últimos días, la Iglesia-Novia verdadera llega a la
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