Page 25 - UNI III LITERATURA SEC 3
P. 25
Literatura 5° UNI
El mundo es ancho y ajeno (Argumento)
Rumi, la comunidad olvidada en la crestería de los Andes, vivía en medio de paz y contento, sus campos trabajados
con cariño le producían lo suficiente. Cierto día llegaron los montoneros, gritando unos: “¡Viva Cáceres!” —Eran los
colorados—, y otros: “¡Viva Iglesias!” —los azules—. Estos montoneros dejaron en Rumi ingratos recuerdos e hijos
bastardos como Benito Castro, quien repudiado por su padrastro vivió en la casa del alcalde hasta que partió a
conocer el mundo. Con todo esto había en Rumi paz y contento. Mas, un día, la presencia del poderoso
terrateniente Álvaro Amenábar ensombreció el límpido cielo de la comarca. El gamonal amenazó a Rosendo, el
alcalde, reclamando las tierras comunales. Iñiguez entabló juicio a la comunidad que para defender sus derechos
contrató los servicios del abogado Bismarck Ruiz Amenábar, compró testigos: al Mágico, al gobernador García y a
otros de la comunidad de Muncha, también sobornó a Bismarck, al juez y a otras autoridades. Los comuneros,
huérfanos de influencias, ni siquiera hallan testigos a su justa causa. Todos temían al terrateniente. Bismarck Ruiz
defecciona y engaña a los comuneros: recibirá cinco mil soles, igual que la física Melba, incubadora de la traición.
Solo Jacinto Prieto era leal a Rumi, pero había sido anulado a causa de un lío que le provocó el Zurdo, un vagabundo
lacayo del gamonal. ¿A quién acudir? El despojo era un hecho.
La asamblea convocada por Rosendo Maqui acordó el éxodo: se irían a las faldas del cerro Yanañahui. En esos
roquedales donde crece la miseria como sombras de muerte, pasaron más penurias aún. Muchos se fueron a probar
suerte; algunos como Quispe, Cahua y Condorumi, se volvieron bandoleros. Después Rosendo Maqui fue encarcelado
acusado de abigeato, intento de homicidio y ser compinche del Fiero Vásquez. Golpeado por los gendarmes, el buen
viejo Rosendo murió en la cárcel.
Años después retorna Benito Castro, quien trató de redimir a los suyos y procuró construir la escuela que no pudo
hacer el venerable Rosendo, pues era bueno saber leer y escribir.
Pero Amenábar no cesaba en su ambición: no satisfecho con las tierras despojadas, ahora quiere y necesita gente
que trabaje sus minas o sus plantaciones de coca. ¡Y no hay quién proteja a los indios!
Los gobernantes solían decirles: “Váyanse a otra parte, el mundo es ancho”. Cierto, el mundo es ancho, pero ajeno.
Benito Castro y los suyos mueren defendiendo su tierra y sus vidas, sus cerros y sus animalitos. No quedaba otra
alternativa: vivir o morir abatidos como los cóndores. “Todas las rutas se hallan ensangrentadas”. ¿Adónde ir?
¿Adónde?..
Tema: La lucha por la tierra. El mundo es ancho y ajeno denuncia la destrucción de la comunidad indígena por parte
del latifundismo.
CIRO ALEGRÍA (1909 - 1969)
Nacido en Huamachuco departamento de la Libertad, fue hijo de un terrateniente y conoció la vida indígena a través
de los trabajadores de su padre. Pasó un buen tiempo en la hacienda de Marcabal Grande, propiedad de su abuelo,
donde trabajo al mando de un grupo de peones. Sus conocimientos del mundo andino llegó a través de esos peones
que no solo trabajaban la tierra, sino que le contaban cuentos de su cultura (las novelas de Ciro Alegría están llenas
de cuentos populares de la sierra) Con apenas 16 años empieza su labor periodística en el diario El Norte y, hacia
1930, en el diario La Industria. Por aquellos años, ingresa a la Universidad de Trujillo, pero, aunque fue destacado
alumno, fue expulsado por formar un grupo político. En 1931 ingresa al Partido Aprista. Sufrió persecución, prisión
en dos ocasiones y hasta fue expulsado del país.
Su temporada en Chile fue la de mayor fecundidad literaria. Si bien es honroso y encomiable el respeto y el afecto de
los chilenos hacia nuestro escritor, también es vergonzoso que fuera en el extranjero,por radicalismos políticos,
que alcance la fama continental (inclusive mundial). En Santiago escribe La serpiente de oro (1935) que será
premiada por la Sociedad de Escritores de Chile; Los perros hambrientos (1938), premiada por la editorial Zig-Zag y
El mundo es ancho y ajeno (1941) cuya importancia es tan grande que merece un capítulo aparte. Viaja a Estados
Unidos, Cuba, Puerto Rico, entre otras ciudades de América. trabaja como profesor universitario y, de regreso a
Lima, ingresa al partido Acción Popular y es elegido diputado por Lima. Fallece el 17 de febrero de 1969, de un
derrame cerebral que acabó su vida en su casa de Chaclacayo.
JOSÉ MARÍA ARGUEDAS ALTAMIRANO (1911 - 1969)
Fue un escritor, antropólogo y etnólogo peruano. Como escritor es autor de
novelas y cuentos que lo han llevado a ser considerado como uno de los tres
grandes representantes de la narrativa indigenista en el Perú, junto con Ciro
Alegría y Manuel Scorza. Introdujo en la literatura indigenista una visión interior
más rica e incisiva. La cuestión fundamental que se plantea en sus obras es la de
un país dividido en dos culturas (la andina de origen quechua y la urbana de raíces
europeas), que deben integrarse en una relación armónica de carácter mestizo. Los
grandes dilemas, angustias y esperanzas que ese proyecto plantea son el núcleo de
su visión.
Su labor como antropólogo e investigador social no ha sido muy difundida, pese a su importancia y a la influencia que
tuvo en su trabajo literario. Se debe destacar su estudio sobre el folclore peruano, en particular de la música
andina; al respecto tuvo un contacto estrechísimo con cantantes, músicos, danzantes de tijeras y diversos
bailarines de todas las regiones del Perú. Su contribución a la revalorización del arte indígena, reflejada
especialmente en el huayno y la danza, ha sido muy importante.
Fue además traductor y difusor de la literatura quechua, antigua y moderna, ocupaciones todas que compartió con
sus cargos de funcionario público y maestro.
Compendio -56-