Page 103 - OVA INTEGRAL COVID-19
P. 103
Teniendo en cuenta la forma en que las áreas se integran para comprender las sociedades
humanas te queremos contar que a través de la historia han tenido lugar múltiples
pandemias, en diferentes países, que transformaron nuestra vida en sociedad porque se
redujo la población humana, se profundizaron problemáticas sociales-ambientales o se
transformó la vida. A continuación, podrás hacer la siguiente lectura con una línea del
tiempo, en la que encontrarás las diferentes pandemias humanas, recordarás las diferentes
edades de la historia e identificarás diferentes problemáticas. Luego, realizarás una segunda
lectura para comprender diferentes aspectos de la pandemia en nuestro país.
Pandemias humanas: nuestra relación con la naturaleza
Las pandemias registradas en las diferentes edades de la historia humana nos recuerdan que
somos seres biológicos. Somos Homo Sapiens, una de las últimas especies en poblar el
planeta. Desde la prehistoria hasta la actualidad nos ubicamos cerca de los ríos y a los
frutos que nos da la Tierra. Siempre hemos alterado la naturaleza, pero nuestros
antepasados humanos supieron salvaguardar el planeta para que nosotros pudiéramos vivir,
junto a otras especies. Los pueblos indígenas consideraban el planeta como un hogar. Por
ejemplo, los Incas de Sudamérica nombraron a la Tierra como Pachamama, que significa
Madre Tierra. De esta forma, su relación con la naturaleza era sagrada y no se podía atentar
o lastimar a los ecosistemas. Reconocían que alterar el sabio equilibrio del planeta,
implicaba hacernos daño a nosotros mismos porque nos condenaba a la infelicidad.
¿Cuándo empezó a cambiar todo? Al finalizar la Edad Media, durante el siglo XV, las
sociedades indígenas de América y África fueron casi exterminadas por la conquista
europea. Esta conquista se justificó con la difusión de la religión católica y las ideas de
civilización europeas a los indígenas. Durante el siglo XVI y XVII Europa empezó a situar
al ser humano como centro del universo, a esto se le llamó antropocentrismo: el hombre era
superior a la naturaleza.
Todo esto consolidó la Revolución Industrial, en el siglo XVIII. Desde ese momento, la
vida europea decidió aceptar el capitalismo como el sistema en el que construiríamos
nuestra vida individual y colectiva, además de dominar la naturaleza. Europa difundió esta
idea en sus colonias americanas y del África. La naturaleza empezó a ser un objeto y dejó
de ser sagrada.
El capitalismo privilegia la acumulación de dinero y propiedades privadas, es decir,
concentrar mucha riqueza económica. Para esto es fundamental una economía basada en
empresas encargadas de la extracción y explotación de los bienes comunes de la naturaleza:
agua, energía, tala de bosques, minerales, petróleo, cacería de especies, ganadería
72