Page 177 - ANTOLOGÍA POÉTICA
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¡Melancólico ensueño ilusorio
                  de mi incoherente divagar!
                  Fantasía disparatada
                  de mi espíritu singular!
                  Delirio ingenuo que se trueca
                  -irónico y duro- en pesar…
                  ¡Melancólico ensueño ilusorio
                  que no podremos realizar…!

                  ¡Riela en mi alma tu recuerdo
                  como la luna sobre el mar…!




                  Canción ligera


                  Me quedas tú, y me donas tu alegría
                  con el dolor, y tu miel deleitable
                  con el acerbo aloe.
                  Me quedas tú, y la luz que tu alma cría
                  dentro la tenebrura inenarrable
                  de mi yo solitario:


                  Siempre loe
                  tu don ilusionario.


                  Me quedas tú, y el claro sortilegio
                  de tus ojos rïentes: con su hechizo
                  mi soledad se puebla.


                  Me quedas tú, y tu risa, cuyo arpegio
                  me embriaga, y tu tesoro de oro cobrizo
                  solaz del alma sola:


                  La gris niebla
                  tu regalo aureola.

                  Me quedas tú, y el filtro que tu ardida
                  boca frutal, sombreada, en mis febriles
                  resecos labios vierte.


                  Me quedas tú, la ingenua enardecida,
                  me quedas tú, la experta, de sutiles
                  tácticas retrecheras:


                  Vida. Muerte.
                  Lo que quieras.


                  BIBLIOGRAFÍA:
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