Page 108 - REVISTA OPRALOTECA 10

Grupo de investigación Oralidades, Narrativas Audiovisuales y Cultura Popular en el Caribe Colombiano

Un gobierno que no quiere aceptar las políticas de la reparación y sujetos directos del conflicto:
Ley 1448, que tenemos derecho nuevamente a una ver- ¿cómo ven hoy al Centro de Memoria?
dad, justicia, reparación integral y garantías de no repe-
tición. En estos momentos solo tocó un punto complejo RP: Bueno, esa es una pregunta bien interesante porque
“la tierra está en manos de los que no se ensucian las para nosotros el Centro Nacional de Memoria Histórica
uñas”. Los territorios que ocupaban las extintas Farc no fue la plataforma para contar la verdad desde nuestra
son entregados a las víctimas que dejó este grupo arma- perspectiva. Hicimos libros, documentales, obras de
do. Para nadie es un secreto la persecución de quienes teatros. Entre otras cosas, trabajamos con comunidades
cambiaron el arma por las palabras. La única opción que estaban siendo invisibles. La diferencia radica en
que tenemos es juntarnos. Hoy somos parte del Espacio que se fortalecían las iniciativas de cada comunidad (no
Regional de Construcción de Paz de los Montes de Ma- se imponían procesos de otros lugares). Esto sucede en
ría, más de 300 organizaciones de base. Y como te co- todo Colombia siendo incluyentes. Nosotros contamos
menté anteriormente, el Kiosco de Memoria hace parte con el primer monumento a las víctimas, cuyo oferente
de la Red Colombiana y Latinoamericana de Lugares fue Edward Cobo Téllez (Diego Vecino), yo fui su di-
de Memoria; tratamos de blindarnos para subsistir. señador, pero acatando lo que mi comunidad quería que
se mostrara, un monumento al campesino “en memoria
La verdad para mí es la reparación más grande “vale a los masacrados y en homenaje a los que seguimos en
más que 100 años de cárcel y que 1000 millones de pe- pie”. Un ícono de la reconciliación y el perdón. Estas
sos”. Los Guáimaros fue otra masacre que hubo acá en reparaciones simbólicas se convirtieron en la columna
San Juan, donde mueren 15 personas en el 2002 un 30 vertebral para garantizar la no repetición.
y 31 de agosto. El primer día, ocho campesinos fueron
asesinados; al día siguiente siete familiares y amigos Miles de organizaciones nos sumamos para que el rem-
que fueron a buscarlos corrieron con la misma suerte. plazo de Gonzalo Sánchez fuese una persona compro-
Van a cumplir 18 años. Nadie se adjudica esta masa- metida con este mundo de víctimas que de una u otra
cre. Este es otro punto neurálgico y controvertido de forma sufrieron hechos violentos. Los dos primeros
los acuerdos de paz. La ley 1448 expira en el 2021, y postulados no se posesionaron por nuestra incidencia.
la reparación es una ilusión. El Gobierno espera como Pero a Darío Acevedo nos lo impusieron. Una persona
felino a su comida que esta muera ahí. La incidencia que niega el conflicto armado en Colombia no reconoce
política de las organizaciones lucha porque se extienda víctimas. Entonces qué hace dirigiendo el Centro. Nos
10 años más. La contribución más grande que han dado quieren tatuar una verdad oficial donde muchos milita-
estos acuerdos es el empoderamiento de las organiza- res y ganaderos que participaron o financiaron grupos
ciones: “el campesino le ha tocado cambiar el machete paramilitares sean las verdaderas víctimas de este país
por el lápiz”. maravilloso.
Las organizaciones de víctimas a nivel nacional esta-
FS: Cuando el Gobierno crea el Centro mos pensando seriamente en retirar todo el material que
Nacional de Memoria como el instrumento reposa en el CNMH. Con Gonzalo se materializa un
para mantener las memorias de un proceso ¡Basta ya! a nivel nacional.
nefasto como fue este, y hoy vemos que ese
instrumento se ha convertido más bien un Es más, si te cuento algo, nosotros como Montes de
proceso de invisibilización de esta parte del María exigimos un basta ya montemariano porque no
conflicto, ustedes como sujetos directos de nos veíamos reflejados dentro del basta ya nacional. Se

108